Los líderes bálticos de la OTAN buscan reforzar la seguridad tras los constantes sabotajes a los cables submarinos
Expertos y políticos acusaron en los últimos meses a Rusia de orquestar una guerra híbrida. Los ataques se han atribuido a una “flota en la sombra” de buques, a menudo envejecidos y que operan bajo una propiedad opaca, que transportan petróleo crudo y productos petrolíferos rusos