Francisco Javier Almeida Lopez De Castr

Álex, de 9 años, se había disfrazado para celebrar Halloween. Era una noche feliz. Pero todo cambió cuando desapareció y las alertas sonaron en la población de Lardero, España. Cuando lo hallaron, el niño ya agonizaba en brazos de Francisco Javier Almeida López de Castro, quien se había establecido en esa zona residencial un año antes. El horror destapó una historia que nadie conocía: había estado condenado por asesinato y abuso sexual y le había otorgado la libertad condicional. Los detalles de un crimen que sacude a Europa