"Soñar no cuesta nada", solían decir nuestros abuelos. "El tiempo es oro", era otra de sus frases. En la Navidad, vale la pena recordarlo. A veces no hace falta más que un poco de voluntad para hacer que una acción nuestra tenga tanto impacto en la vida de otro que su valor se aprecie como el del metal más precioso.
Hay muchas posibilidades de generar alegría en estas fechas: dar un abrazo a quien lo está necesitando, compartir una cena con quien está viviendo en la calle o, simplemente, escuchar a un vecino.
A veces se nos pasan por alto las múltiples maneras que tenemos de hacer que nuestra vida sea más feliz mejorando un poco la de los demás.
Por eso, en esta Navidad estaría bueno ser voluntario en alguna de las tantas organizaciones que mostramos y visitamos en "De Corazón" a lo largo del año.
Si querés vivenciar esa sensación única, en estas fiestas doná tu tiempo para sumar sonrisas, comprá un regalo en alguna cooperativa o empresa que tenga un alto impacto social, salí a regalar juguetes o a dar comida a quien lo necesite.
¿Querés hacer algo más divertido? Asistí a alguna fiesta cuyo objetivo sea la colaboración con una causa noble y solidaria.
Las propuestas son infinitas pero el fin es siempre el mismo: ayudar.
"De Corazón" quiere que esta navidad sea más solidaria.
¡Brindamos por ello!
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