Semanas atrás, personal de la Policía de la Ciudad detuvo a una mujer de nacionalidad peruana que circulaba por el barrio porteño de Almagro a bordo de una camioneta con 14 panes de cocaína y 130 dosis listas para su comercialización. Al detectar la presencia policial, la sospechosa intentó escapar a toda velocidad, pero los policías la interceptaron a tiempo y terminó aprehendida en el lugar.
Si bien las imágenes del operativo se conocieron en las últimas horas, fuentes policiales le precisaron a Infobae que el hecho ocurrió el pasado 20 de diciembre, cuando efectivos policiales realizaban un patrullaje preventivo por la zona e identificaron a la mujer que estaba al volante de la camioneta, una Chevrolet Tracker color gris plata estacionada en la puerta de un taller mecánico, en la esquina de Agrelo y Sánchez de Loria.
El vehículo tenía sus balizas encendidas y su conductora miraba a su alrededor con insistencia. Lucía intranquila, incómoda, lo que llamó la atención de los agentes. De inmediato, los efectivos fueron a identificarla y la mujer intentó fugarse para ser interceptada a pocos metros.
Una vez esposada, los policías requisaron el interior de la camioneta y hallaron los 14 panes de cocaína y 130 envoltorios, marcados con los números 50, 40 y 30, probablemente en referencia al peso de cada paquete, un total de 17 kilos, 300 gramos.
La mujer, fue identificada como K.L.G.C., de 36 años y oriunda de Perú, sin documento argentino.
Posteriormente, efectivos de la División Investigaciones Comunales 3, secundados por personal del DOEM, el equipo de Dispersión 4 y la División Perros, realizaron un allanamiento conjunto con la División Antidrogas Sur IV en una casa ubicada en Pedro de Mendoza al 1200, en pleno barrio de La Boca, a la vera del Riachuelo, aparentemente vinculado a la mujer.
En la causa intervino el Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 2, a cargo del juez Sebastián Ramos. El magistrado ordenó la detención de la sospechosa y la incautación de la droga hallada en el interior del vehículo, como así también el secuestro de la camioneta en la que solía vender la sustancia, el teléfono celular de la dealer y 25.230 pesos en efectivo que llevaba consigo al momento de su detención.
Hasta este jueves 9 de enero, K.L.G.C. permanecía detenida e incomunicada. Sus vínculos son un misterio: su nombre no figura en condenas narco de primera y segunda instancia en el fuero federal tanto porteño o bonaerense, de acuerdo a registros de los últimos seis años.