Un brutal crimen fue descubierto este miércoles por la tarde en el barrio Pico Rojo de General Rodríguez. Natalia Herrera, de 32 años, llamó al 911 poco después de las 15 para reportar que su hija Nayla Malena Agüero, de 7 años, desapareció de su vista mientras jugaba en una pileta de lona en el patio de su casa, en la esquina de Acoyte y Ambato.
La DDI de Moreno-General Rodríguez se presentó en el lugar poco después para iniciar el protocolo de búsqueda. Rápidamente, llegaron a Ariel Axel Díaz, de 18 años, quien vive junto a Herrera y a su hija en la misma propiedad, en la planta baja de una casa de dos pisos.
El joven permitió que registren el lugar los agentes de la DDI de Moreno-General Rodríguez. Pero en una primera mirada rápida, los policías no encontraron nada extraño. Así, recorrieron el barrio. Sin datos precisos de la nena, decidieron volver al lugar donde había sido vista por última vez.
“Los vecinos no la habían visto salir de la casa y entonces volvieron a la casa de Díaz, que vive debajo del departamento que alquila la mamá de Nayla”, explicaron fuentes del caso a Infobae. Allí, encontraron el cadáver de la menor, envuelta entre sábanas en un ropero, según confirmaron las fuentes consultadas por este medio.
De inmediato, Díaz fue arrestado y trasladado a una dependencia de la zona. Estaba solo en su casa al momento de la desaparición de la menor. Ahora la autopsia será clave para determinar si intentó abusar sexualmente de Nayla.
El expediente para esclarecer el hecho está a cargo de la fiscal Gabriela Urrutia, titular de la UFI N°10 del departamento judicial de Moreno-General Rodríguez, según adelantó el portal Semanario Actualidad.
Personal de Policía Científica trabajaba en la casa del acusado al cierre de esta nota. La situación en la zona es sumamente volátil: varios vecinos se reunieron frente a la propiedad con la intención de quemarla, lo que implicaría perder las evidencias clave para lograr una posible condena.