El financista de Rosario Mauro Andrés Esqueff (35) fue detenido en la mañana de este miércoles en medio de un operativo que incluyó tres allanamientos llevados a cabo por la División de Delitos Económicos de la Policía de Investigaciones, por una causa que impulsa la fiscal María Teresa Granato, del Ministerio Público de la Acusación. El aprehendido irá a audiencia imputativa la próxima semana en el Centro de Justicia Penal por estafas a 300 clientes, según indicaron los abogados que representan a la querella.
Los operativos se hicieron en Cerrito al 600, en el barrio República de la sexta; en un bar de Presidente Roca al 100, en el centro de Rosario; y en un inmueble de San Martín al 2900, en Tablada. Los agentes secuestraron siete celulares, una tablet, una computadora de escritorio, una notebook, dos pendrives, un millón de pesos, más documentación relacionada con un auto y otras anotaciones que serán analizadas en los próximos días.
A los agentes que participaron de los procedimientos les llamó la atención que en algunos de los celulares incautados, que era usado cotidianamente por el financista, él también respondía mensajes a sus clientes y víctimas en carácter de secretaria. “Demuestra que vivía mintiendo”, aseveró una fuente policial.
Gustavo Feldman, abogado representante de la querella, indicó a Infobae que la audiencia será entre el martes y miércoles próximo. “Estafó a más de 300 personas bajo un esquema Ponzi. Ofrecía planes de inversión que llegaban a prometer rendimientos anuales de hasta 122 por ciento en dólares, fijando un valor fijo del tipo de cambio”, señaló.
“Estamos frente a una estafa de gran escala que causó un daño inconmensurable, tanto desde lo cuantitativo como desde lo cualitativo. Las víctimas de Esqueff son en su mayoría familias que fueron desapoderadas de los ahorros de toda su vida. La Justicia debe estar a la altura y dar acabada demostración de respaldo a la ciudadanía frente a estos maleantes”, amplió.
Según aseguró Feldman, en noviembre presentó una nueva denuncia ante el Ministerio Público de la Acusación. En la misma, aportaron indicios que daban cuenta de que el financista “trabajaba junto con otras personas que oficiaban de captadoras de futuras víctimas”. “También continuó desplegando el esquema luego de haber anunciado a sus víctimas más antiguas la imposibilidad de pagarles. Es decir, caído en desgracia, siguió captando ahorristas, quienes bajo sendas promesas ardidosas entregaban sumas de dinero en efectivo. Su objetivo siempre fue hacerse del dinero ajeno”, concluyó.
Esqueff era representante del grupo Gema y proviene de una conocida inmobiliaria familiar de Rosario. Desde agosto pasado comenzó a incumplir con los pedidos de retiros de los ahorristas y ya en septiembre fueron radicadas las primeras presentaciones judiciales por la vía penal en su contra, de acuerdo a datos publicados por Rosario3.
“El objetivo perseguido en este caso es poder encontrar el dinero que Esqueff quitó a las víctimas, para que retorne. Sabemos que el Ministerio Público de la Acusación también lo considera así. En ese sentido, estamos convencidos de que la vía más idónea es la penal, ya que la civil aparece con facultades insuficientes para poder determinar esa cuestión”, finalizó.