La Ruta 40 fue escenario de un accidente que pudo haber tenido consecuencias trágicas. Un vehículo se salió de la cinta asfáltica y cayó al Lago Nahuel Huapi, cerca de un camping, el pasado sábado alrededor de las 14 horas, a unos 30 kilómetros de Villa La Angostura.
Las autoridades locales, junto con los servicios de emergencia, respondieron rápidamente al incidente, lo que permitió a los ocupantes del automóvil salir ilesos antes de que el vehículo se hundiera completamente en las frías aguas del lago.
El accidente, según informó el portal LM Neuquén, activó un operativo de rescate que involucró a varias instituciones, incluyendo a la Prefectura Naval Argentina, el Parque Nacional Nahuel Huapi y la Policía de Neuquén que trabajaron en conjunto para asegurar la seguridad de las personas involucradas y coordinar las maniobras necesarias para recuperar el automóvil sumergido. Según informaron fuentes oficiales, los ocupantes del vehículo no sufrieron lesiones graves, lo que evitó que el incidente se convirtiera en una tragedia mayor.
Testigos del accidente, entre ellos turistas y acampantes de la zona, destacaron la rapidez con la que las autoridades llegaron al lugar. Un hombre comentó que escucharon un fuerte ruido y vieron cómo el auto se deslizaba hacia el agua, pero afortunadamente, las personas lograron salir rápidamente.
Las características geográficas del lugar, junto con las bajas temperaturas y las condiciones del terreno, presentaron desafíos para las tareas de rescate, pero el trabajo coordinado de los equipos permitió controlar la situación en pocas horas.
En tanto, las autoridades aprovecharon la ocasión para recordar a los conductores que es imperativo manejar extrema precaución, respetando los límites de velocidad y las señalizaciones viales, especialmente en rutas como la 40, que aunque son de gran atractivo turístico, también presentan tramos peligrosos.
Además, enfatizaron la necesidad de mantener los vehículos en buen estado mecánico para evitar situaciones de riesgo, considerando que las condiciones climáticas, como el viento o la posible presencia de hielo, pueden contribuir a despistes si no se toman las precauciones necesarias.
Y ayer domingo y en un caso con aristas similares, pero con consecuencias trágicas, Magalí Vera, de 34 años, murió luego de caer con su auto al río Quequén, en la localidad bonaerense de Necochea. Junto a ella viajaba su novio, Javier Cerfoglio, de 39, que pudo escapar del vehículo y sobrevivió. Ahora investigan si perdieron el control mientras discutían, y si manejaban con alcohol en sangre.
Eran las 5 de la madrugada y una intensa lluvia azotaba a la ciudad costera. Vera y Cerfoglio volvían en su Honda Fit color rojo de un casamiento que habían compartido esa noche. Avanzaban sobre el camino que bordea el río Quequén Grande, cuando repentinamente se salieron de la ruta y fueron a parar directo al agua. El siniestro ocurrió entre la terminal de ómnibus y el Club Necopesca.
El vehículo volcó y quedó dado vuelta, con el habitáculo bajo el agua y las ruedas en la superficie. Cerfoglio alcanzó a abrir la puerta y nadar para salvar su vida. Su novia, en cambio, no corrió la misma suerte. Su cuerpo apareció a pocos metros del auto, cerca del muelle del Club Necopesca.
Una vez que fue estabilizado por personal médico en el lugar de los hechos, el hombre que sobrevivió fue trasladado al Hospital Municipal Dr. Emilio Ferreyra de Necochea, donde además de atenderlo le practicaron un examen toxicológico para conocer si había consumido drogas o tomado alcohol durante el casamiento, de acuerdo a lo informado por la prensa local.
En el caso tomó intervención la UFI N° 20 de Necochea, a cargo del fiscal Marcelo Lucifora, que por estas horas busca esclarecer los motivos del siniestro vial e investiga al hombre por presunto femicidio. En ese sentido, será clave establecer quién estaba manejando el vehículo. Cerfoglio fue quien le dijo a la Policía, todavía en el lugar del accidente, sobre una discusión previa al vuelco.