Minutos antes de que Rosario Central jugara de local en el Gigante de Arroyito ante Racing en la tarde de este sábado, atacaron a tiros la casa de Leopoldo Martín “Pitito” Martínez, quien quedó al mando de la barra brava del Canalla tras el doble crimen de Andrés “Pillín” Bracamonte y Daniel Raúl “Rana” Attardo ocurrido a metros del estadio el pasado 9 de noviembre.
La balacera tuvo lugar en el barrio Villa Manuelita, en la zona sur, pasadas las 18. El gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones que fue comisionado al lugar secuestró ocho vainas servidas calibre .40 que serán enviadas a peritar por orden de la unidad fiscal de Flagrancia del Ministerio Público de la Acusación.
Los agentes que trabajaron en la escena constataron impactos de bala en la puerta y en el frente del domicilio que “Pitito”, que no se encontraba en el lugar al momento del operativo, y que se supone que estaba en el Gigante de Arroyito por el partido de local del Canalla ante La Academia. Una mujer fue entrevistada por la Policía y aseguró no haber visto a los atacantes, por lo que se desconoce, de momento, si se movilizaban en moto o en auto.
El exterior de la propiedad, según pudo verse en allanamientos contra Martínez que ocurrieron en julio de 2020 –en una causa de lavado de activos, cuyo investigado era “Pillín” Bracamonte–, tiene la particularidad de estar pintada como la camiseta de Central, una mitad azul y la otra amarilla.
Según indicaron a Infobae investigadores policiales, “Pitito” había recibido hace varios días una advertencia de la presunta banda narco conocida como “Los Menores” de que se hiciera a un lado en la conducción del paraavalanchas auriazul y, aparentemente, no habrían llegado a un acuerdo.
Martínez era el número 3 de la barra brava de Central. De acuerdo a datos que se desprenden de distintas investigaciones, por encima de él estaban “Pillín” Bracamonte y “Rana” Attardo, quienes fueron acribillados a tiros el 9 de noviembre en Avellaneda al 700 bis, a metros de la cancha, a la salida del partido que había jugado el club rosarino ante San Lorenzo.
En el legajo por el doble homicidio de Bracamonte y Attardo no hay detenidos. El equipo integrado por los fiscales Alejandro Ferlazzo, Georgina Pairola y Luis Schiappa Pietra tiene varias hipótesis, y una de ellas es que “Los Menores” habrían sido quienes planificaron el ataque para avanzar en la conducción de la hinchada.
Los fiscales también tienen en su poder la causa del crimen de Samuel Medina, alias “Gordo Samu” o “Gordo Quique”, el yerno del líder de Los Monos -Ariel Máximo “Guille” Cantero- asesinado de 16 disparos el pasado 1° de octubre en la zona norte de Rosario tras salir del partido que había jugado de local el Canalla ante Vélez Sársfield. A Samuel se cree que también lo mataron “Los Menores”, según una de las hipótesis. En esa investigación tampoco hay detenidos.