Un comerciante denunció este domingo que entraron a robar por la madrugada a su departamento ubicado en la zona norte de Santa Fe capital. Apenas llegó la policía, la víctima informó que se habían llevado un botín equivalente a 1.300.000 dólares, pero más tarde cambió su versión. La mecánica del robo y todo lo que ocurrió a continuación abrieron varios interrogantes alrededor del hecho, que ya están siendo investigados por la Justicia.
El golpe fue ejecutado con máxima precisión, y los delincuentes lograron sustraer dinero y joyas mientras el dueño de la vivienda había salido, por lo que no medió violencia alguna.
El “escruche”, como se conoce esta modalidad de robo, sucedió en un apartamento del barrio 21 de Octubre, en la esquina de las calles Pasaje Echague y Andía, en cercanías al hospital municipal “Dr. Gumersindo Sayago”. La víctima había salido en la noche del sábado y, cuando regresó al otro día, se encontró con que habían irrumpido en su casa.
La entrada principal del departamento estaba destruida y el interior de la vivienda completamente revuelto. La millonaria suma estaba escondida en un maletín que, a su vez, se encontraba guardado en una caja de cartón. Los delincuentes hallaron el dinero en uno de los cuartos, al que también accedieron luego de violentar la puerta.
En la denuncia inicial se dejó asentado que lo robado eran los ahorros de toda la vida del suegro de la víctima. Aunque en ese momento no se precisaron las cantidades, una parte de lo sustraído era efectivo y lo restante se dividía entre oro, alhajas y joyas. Del domicilio también se llevaron la fuente DVR que contiene las grabaciones de las cámaras de seguridad que registraron a los delincuentes.
Al llegar, la víctima del robo llamó al 911 y al lugar arribó personal policial del Comando Radioeléctrico. Luego tomó intervención la Policía de Investigaciones de Santa Fe (PDI). De acuerdo a lo informado por fuentes del caso, los efectivos ubicaron cámaras de seguridad del barrio que podrían aportar información clave para identificar a los ladrones. Durante los peritajes también se reunieron algunas pruebas en el interior del departamento asaltado.
En la tarde del domingo el comerciante asaltado se presentó en sede policial para ratificar su denuncia y cambió sustancialmente su versión. Según confirmaron a Infobae fuentes judiciales, ahora dijo que la cantidad que le sustrajeron es de 120.000 dólares y 400.000 pesos, pero no explicó la razón por la que se contradijo. El efectivo en moneda local correspondería a una indemnización que había cobrado recientemente.
Al frente de la causa está Ignacio Lascurain, de la Fiscalía Regional 1. La Justicia ahora deberá esclarecer no solo la autoría del robo, sino también el motivo detrás del cambio de versión que echó un manto de sospecha sobre las víctimas.
Analizan suspender al juez Bailaque
Después de comprobar la información presentada en el caso, el juez federal de Rosario Marcelo Martín Bailaque está en la cuerda floja. Un equipo de fiscales le atribuyó presuntas maniobras de corrupción, una posible conexión con el capo narco Esteban Lindor Alvarado y haber manejado de manera irregular los fondos de una intervenida cooperativa portuaria para beneficiar al financista Fernando Whpei.
Toda la información ventilada por los integrantes de la Procelac, Procunar y del Ministerio Público Fiscal fue enviada al Consejo de la Magistratura, que aceptó darle ingreso y sesionará el próximo martes a las 9 para abordar el caso. Según indicaron fuentes judiciales a Infobae, la sesión se hará bajo la modalidad mixta, con participantes de forma presencial y otros a través de Zoom. Allí, donde desde 2013 ya se tramita un proceso contra el juez que evalúa su desempeño en la causa por narcotráfico contra Alvarado –donde fue sindicado de haber demorado autorizaciones de medidas, como intervenciones telefónicas que eran clave para avanzar contra su banda–, se le acumularán los legajos.
Si bien se conoce que los procesos administrativos son largos, el Consejo de la Magistratura podría definir una suspensión preventiva de Bailaque antes de fin de año. El jueves pasado, ante el juez de Garantías Eduardo Rodrigues Da Cruz, los fiscales Juan Argibay Molina (Procelac), Matías Scilabra (Procunar) y Federico Reynares Solari (Ministerio Público Fiscal distrito Rosario), atribuyeron las presuntas maniobras cometidas por el magistrado en tres causas diferentes de cuando era titular del Juzgado de Instrucción N°4, antes de la puesta en vigencia del nuevo Código de Procedimiento Penal.