Una adolescente oriunda de Santa Fe fue secuestrada días atrás, su mamá radicó la denuncia y personal de Gendarmería logró rescatarla en la provincia de Misiones. Según trascendió, la menor habría sido vendida para que se casara con un integrante de la familia de secuestradores.
La menor había desaparecido el pasado 28 de octubre en la localidad de Santo Tomé y de inmediato, su mamá radicó la denuncia. Allí sostuvo que “su hija había sido sustraída por una familia de gitanos misionera”, informaron desde el Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe.
El caso se encuentra a cargo del fiscal Roberto Olcese y la fiscal María Laura Urquiza, quienes ordenaron una serie de acciones. En ese marco, personal de Gendarmería Nacional, a través de sus Unidades de Investigaciones de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales de Misiones y Santa Fe, trabajó de manera conjunta para localizar a la menor.
A partir del dato de la madre, los investigadores se enfocaron en llamadas telefónicas y trabajo de geolocalización. De esa manera, lograron dar con el paradero de la adolescente que se encontraba en la ciudad de Posadas, Misiones.
Los fiscales de la causa detallaron que se ordenaron numerosas intervenciones telefónicas y durante seis días realizaron las escuchas. A partir de allí “se registraron conversaciones en un idioma gitano” y “trabajamos con las antenas en las que podíamos geolocalizar a la menor de edad y a la familia sospechada de haberla llevado”, informó diario El Litoral.
Ante los datos recolectados, el Ministerio Público Fiscal ordenó que personal de Trata de la policía de Santa Fe se traslade hacia Misiones y junto con Gendarmería encontraron a la menor junto con la familia acusada.
Gendarmería Nacional informó que tras identificar a los integrantes de la familia, se verificó que son “personas pertenecientes a un mismo grupo familiar quienes habrían abonado una suma de dinero por ella con el fin de que contrajera matrimonio con uno de sus integrantes”. Por tal motivo, quedaron implicados en una causa por presunta trata de personas (Ley 26.364).
Los fiscales a cargo de la causa señalaron que luego de detectar información vinculada al caso y de realizar un profundo trabajo de geolocalización, persona de Gendarmería Nacional acudió a Posadas para realizar tareas de inteligencia en la zona. Allí confirmaron la presencia de la adolescente junto a una familia que ahora enfrenta una causa por trata de personas.
A su vez, se remarcó que “con la investigación ya avanzada, solicitamos la declaración de incompetencia, y el juez José Luis García Troiano así lo dispuso”. Por tal motivo, luego de reuniones realizadas en el transcurso de la semana, se determinó que el legajo fuera remitido a la Justicia Federal.
Como parte de los trabajos realizados, en un operativo conjunto en Posadas, las autoridades judiciales, junto con la Subdirección de Apoyo a las Víctimas de la provincia, llevaron a cabo registros simultáneos en tres domicilios. Durante estas acciones, se incautaron elementos y documentación considerados de interés para la investigación, según informaron las autoridades.
La intervención judicial se centró en asegurar la protección de la víctima, quien fue resguardada y recibió atención por parte de personal especializado. Este enfoque busca garantizar su bienestar y seguridad mientras se desarrollan las investigaciones pertinentes.
Los allanamientos forman parte de una estrategia coordinada para esclarecer los hechos y reunir pruebas que puedan ser cruciales en el avance del caso. Las autoridades no han revelado detalles específicos sobre los elementos incautados, pero se espera que estos contribuyan significativamente al proceso judicial en curso.
Búsqueda de un joven desaparecido en La Plata
La desaparición de Miguel Edgardo Giménez, un hombre de 36 años residente de City Bell, ha generado una creciente preocupación en su familia, especialmente tras recibir un mensaje anónimo que sugiere que fue apuñalado. Desde el 8 de agosto, no se tiene información sobre su paradero, lo que ha sumido a sus allegados en una profunda angustia.
Giménez, quien trabajaba como albañil, fue visto por última vez por sus compañeros de trabajo hace más de tres meses. La incertidumbre se intensificó cuando su hija de 14 años recibió un mensaje en Facebook alertando sobre el posible ataque violento que habría sufrido su padre. Este mensaje, sin embargo, no proporcionó detalles adicionales sobre su estado o ubicación.
La hermana de Miguel, Carolina, expresó su desesperación al medio 0221.com.ar, afirmando que desde el 8 de agosto no ha podido comunicarse con él. A pesar de sus repetidos intentos de contacto, no ha recibido respuesta alguna, lo que ha incrementado su preocupación. “No sabemos absolutamente nada”, declaró Carolina, quien también mencionó que desde entonces no ha podido dejarle mensajes en su teléfono.