- Rodolfo Gabriel Mendoza, jefe policial de San Javier, recibió una condena por acoso sexual agravado en segunda instancia.
- La sentencia incluye 15 días de arresto, una multa de 1.094.366,25 pesos y un curso obligatorio de prevención de violencia de género.
- El juez Fabio Mudry ratificó el fallo, subrayando la necesidad de visibilizar la cultura de impunidad en las fuerzas policiales.
Lo esencial: Rodolfo Gabriel Mendoza, un alto mando de la policía de San Javier, Santa Fe, fue condenado por acoso sexual a tres subalternas, según confirmaron fuentes judiciales. La sentencia, ratificada por el juez de la Cámara de Apelación en lo Penal, Fabio Mudry, incluye una sanción de 15 días de arresto y una multa de más de un millón de pesos. Además, Mendoza deberá asistir a un curso de prevención de violencia de género. Durante el juicio, testimonios indicaron que el acusado realizaba comentarios sexualizados y tocaba los rostros y cabellos de sus víctimas en la Jefatura de Policía, aprovechando su posición de autoridad.
Rodolfo Gabriel Mendoza, un comisario de la ciudad de San Javier en la provincia de Santa Fe, fue condenado por acoso sexual a tres subalternas. Los hechos ocurrieron en 2022.
La sentencia, confirmada en segunda instancia, incluye 15 días de arresto, una multa de 1.094.366,25 pesos y la obligación de asistir a un curso sobre prevención de violencia contra las mujeres.
El caso fue revisado por el juez de la Cámara de Apelación en lo Penal, Fabio Mudry, quien ratificó el fallo inicial de un juicio contravencional, en el que Mendoza fue hallado culpable de acoso sexual agravado por su condición de funcionario público.
Según informó el portal Rosario3, el fiscal Ezequiel Hernández, a cargo de la causa, subrayó la importancia de la sentencia, destacando la dificultad de investigar y sancionar este tipo de violencia de género dentro de las estructuras policiales.
Durante el juicio, se presentaron testimonios que describieron cómo Mendoza acosaba a sus subalternas en la sede de la Jefatura de Policía de la Unidad Regional XIV. Los relatos indicaron que el acusado tocaba los rostros y cabellos de las mujeres, además de hacer comentarios sexualizados sobre sus cuerpos y uniformes. Dos de las víctimas eran nuevas en la fuerza, mientras que la tercera había sido trasladada recientemente desde otra región de la provincia.
El camarista Mudry, al confirmar la sentencia, incorporó análisis sociológicos y antropológicos que abordaron la violencia sexual en las fuerzas de seguridad y el silencio impuesto por el miedo en estos entornos. Este enfoque busca visibilizar y combatir la cultura de impunidad que a menudo rodea estos casos.
En julio, una serie de oficiales de la Policía de Córdoba fueron detenidos por abuso sexual agravado y violencia intrafamiliar. Todos son casos separados. El primer detenido es un sargento ayudante acusado de abuso sexual contra una compañera de trabajo durante su turno laboral. La víctima, empleada en el área de limpieza de la misma dependencia, denunció que el acusado la amenazó con un arma para llevar a cabo el ataque.
La Fiscalía de Delitos Contra la Integridad Sexual, bajo la dirección del fiscal Juan Ávila Echenique, asumió la investigación del caso. Como medida inicial, además de ordenar la detención del sargento ayudante involucrado, la fiscalía dispuso la entrega de un botón antipánico a la denunciante.
Horas después, se ordenó la detención de un suboficial con rango de agente, asignado a tareas no operativas, por un caso de violencia familiar denunciado en diciembre del año anterior. La Fiscalía, a inicios de julio, emitió la orden de captura siete meses después del inicio del proceso. Por ello, el agente fue trasladado a la sede judicial responsable de investigar su posible implicación en el hecho, mientras el Tribunal de Conducta de las Fuerzas de Seguridad resolvió su pase a situación pasiva hasta la conclusión del caso.
En otro episodio, un sargento perteneciente a la comisaría de Monte Cristo fue denunciado por agredir sexualmente a una mujer. Ante esta acusación, Echenique, emitió una orden de detención el martes, lo que llevó a las autoridades a concretar el arresto del acusado ese mismo día.