- Iván Aballay y Héctor Oscar Baistrocchi recibieron tres años de prisión condicional por la muerte de Tania Abrile en 2016.
- Ambos aceptaron su culpabilidad por facilitación de consumo de drogas y homicidio culposo en un juicio abreviado.
- La condena incluye medidas restaurativas como el pago de 80.000 dólares y la devolución de un premio recibido en 2019.
Lo esencial: Los dueños de Buenas Noches Producciones (BNP), Iván Aballay y Héctor Oscar Baistrocchi, fueron condenados este viernes a tres años de prisión condicional tras aceptar cargos de homicidio culposo y facilitar el espacio para el consumo de drogas en una fiesta electrónica de 2016, donde falleció Tania Abrile. Como parte de su sentencia, deberán devolver un premio otorgado en 2019 por la Municipalidad de Córdoba, publicar una solicitada reconociendo su responsabilidad y abstenerse de organizar eventos por seis años. También pagarán una compensación a la Fundación Tania Abrile.
Los dueños de Buenas Noches Producciones (BNP), Iván Aballay y Héctor Oscar Baistrocchi, fueron condenados a tres años de prisión condicional por la muerte de Tania Abrile, una mujer de 38 años oriunda de Río Tercero que murió en una fiesta electrónica realizada en el Estadio Orfeo de Córdoba en 2016. La autopsia reveló que la causa del deceso fue provocado por el consumo de pastillas de éxtasis.
Luego de haber aceptado un juicio abreviado en la Cámara 6ª del Crimen de Córdoba, este viernes Aballay y Baistrocchi admitieron su culpabilidad por los delitos de facilitación de espacio para el consumo de estupefacientes y homicidio culposo. A raíz de esto, ambos podrían cumplir su pena fuera de la cárcel de Bouwer, en donde habían sido detenidos en julio por haber viajado reiteradas veces al exterior y violar la restricción penal que les habían aplicado.
El proceso judicial, dirigido por los jueces Enrique Buteler, Pablo Brandán Molina y Esteban Díaz Reyna, incluyó condiciones acordadas que los empresarios deberán cumplir como parte de una “pena restaurativa”. Entre estas medidas, los condenados deberán devolver el Premio Jerónimo que les otorgó la Municipalidad de Córdoba en 2019, durante la gestión de Ramón Mestre como intendente.
Otras de las condiciones que se comprometieron a cumplir fueron la publicación de una solicitada admitiendo su responsabilidad, abstenerse de organizar eventos electrónicos por seis años, realizar tareas comunitarias y pagar 80 mil dólares a la Fundación Tania Abrile, según la información proporcionada por ElDoce.tv.
Además de Aballay y Baistrocchi, fueron sentenciados otros dos implicados. Uno de ellos fue Mario Alfredo Novaro, el jefe de seguridad que trabajó en el evento, quien recibió también tres años de prisión condicional como partícipe necesario de homicidio culposo. El último de ellos fue Walter Barreto que fue condenado a ocho años de prisión por ejercicio ilegal de la medicina y homicidio simple con dolo eventual. En el caso de Barreto, no será liberado debido a la gravedad de su pena, pues fue acusado de haber fingido ser médico y asistir a la víctima.
La muerte de Tania Abrile, una artista plástica oriunda de Río Tercero, ocurrió en la madrugada del 24 de julio de 2016 durante una fiesta electrónica en el Orfeo Superdomo de la ciudad de Córdoba, organizada por la productora Buenas Noches Producciones, en donde se comprobó que hubo venta ilegal de diversos estupefacientes. Según comprobaron los investigadores, la víctima había consumido pastillas de éxtasis dentro del predio, las cuales le provocaron una descompensación y posterior deceso.
El resultado de la autopsia fue compatible con las declaraciones que realizaron sus amigas, quienes aseguraron que la joven había ingerido, al menos, media pastilla durante la fiesta. Producto de esto, la mujer sufrió un paro cardio respiratorio que y, pese a que intentaron asistirla tres veces en el consultorio médico móvil que estaba en el lugar, no pudo ser reanimada.
De acuerdo a la información publicada por Cadena 3, en las primeras dos oportunidades se había identificado como Laura López, pero minutos antes de que se cumplieran las 5 de la mañana su mal estado empeoró. Por este motivo, la recostaron y le colocaron un suero. Finalmente, dos horas más tarde la trasladaron al hospital.
Durante el traslado, la mujer recibió respiración artificial, debido a su imposibilidad para respirar por sí sola. Sin embargo, al ser ingresada en el centro médico municipal los profesionales intentaron reanimarla del paro, pero no tuvieron resultados positivos.