- Una ex empleada del hotel dijo que la propietaria y su sobrino están entre las víctimas. “Es una amiga”, aseguró.
- La Municipalidad confirmó que en el edificio se realizaban obras sin autorización.
- La Justicia investiga el caso como presunto estrago culposo y hay cuatro demorados
Lo esencial: un edificio de diez pisos que albergaba al hotel Dubrovnik en Villa Gesell colapsó esta madrugada, dejando a varias personas atrapadas bajo los escombros. Entre las víctimas está “Rosita”, la propietaria, según Laura, su amiga y ex trabajadora del hotel, quien dio un testimonio desgarrador. La Municipalidad denunció que se llevaban a cabo obras sin autorización en el hotel, mientras que la justicia inició una causa por estrago culposo. Hasta ahora, rescató con vida a una mujer, cuyo estado es crítico, y se encontró el cadáver de un jubilado. Los tareas de rescate continúan.
Laura, una mujer que dijo ser ex empleada del hotel Dubrovnik, el edificio que se derrumbó esta madrugada en la ciudad de Villa Gesell, brindó esta mañana un conmovedor relato mientras esperaba, al margen del cordón policial en la zona del desastre, alguna noticia sobre las personas que todavía están atrapadas bajo los escombros.
En diálogo con C5N, la mujer -visiblemente conmovida y entre lágrimas- dijo que fue empleada del hotel la temporada pasada y aseguró ser amiga de la propietaria del Dubrovnik, a la que identificó como “Rosita”. De acuerdo con Laura, la dueña del hotel sería una de las personas que quedaron atrapadas en el derrumbe.
“Estamos esperando novedades. Sabemos que están atrapados y nada más. No sé la cantidad de personas que estaban trabajando allí. Estaban haciendo remodelación del edificio. Nunca podés decir que esto iba a pasar”, dijo.
“Estamos esperando que salga Rosa. Trabajé para ella. Es una amiga. Estamos esperando a que salgan. Rosita estaba dentro del hotel. Está atrapada. Rosita tiene 51 años y vivía con su sobrino, con una ex compañera y con gente que estaba trabajando, que estaba parando allí”, agregó la ex trabajadora.
Hasta el momento, un jubilado fue encontrado muerto entre los escombros del Apart Hotel. Se trata de un hombre que tiene “entre 80 y 89 años de edad”, según confirmaron esta mañana fuentes policiales a Infobae. Su identidad, por lo pronto, se desconoce.
Mientras tanto, una mujer fue rescatada con vida por los bomberos que trabajan en el lugar. Su estado de salud es crítico. “Se escuchó a una persona con vida. Le están pasando aire”, dijo un funcionario al tanto de las tareas. Los registros del hotel a los que accedió la Justicia hablaban de la presencia de, al menos, nueve personas.
En un comunicado oficial, la Municipalidad afirmó que dentro del edificio del hotel Dubrovnik se llevaron adelante obras sin la autorización correspondiente y que incluso los propietarios del hotel fueron intimados. “En estos momentos, si bien no se puede hablar con exactitud sobre los detalles del derrumbe, sí se puede afirmar que en la parte colapsada (la parte trasera) se habría estado modificando la estructura en forma ilegal e irregular”, indicaron las autoridades.
“El pasado 20 de agosto de 2024, la Municipalidad, a través de la Dirección de Edificios Privados y Espacios Públicos, detecta y paraliza trabajos que se estaban realizando en el interior de la propiedad, sin contar con la debida autorización municipal. Posteriormente a la intimación, los propietarios solicitan mediante un aviso de obra la autorización únicamente de las siguientes tareas: cambio de carpinterías, cambios de revestimientos de pisos, pintura interior, cambio de revestimiento de baños y retiro de mesadas”, finalizaron.
El edificio de diez pisos, donde funcionaba el Apart Hotel Dubrovnik, se derrumbó alrededor de las 0:50. Según testigos y el jefe del operativo, Hugo Piriz, entre 7 y 9 personas se encontraban en el edificio al momento del colapso.
Las labores de rescate, que incluyen equipos especializados y perros rastreadores, continúan mientras intentan evacuar a los atrapados. El intendente local, Gustavo Barrera, confirmó que “cerca del 80% del edificio se vino abajo”, afectando también a edificios vecinos y limitando el acceso de maquinaria pesada.
La Justicia gesellina, con la fiscal Verónica Zamboni -que investigó y llevó a juicio a los rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa-, inició un expediente para investigar el derrumbe por el presunto delito de estrago culposo.