Ezequiel Altamira, un joven de 16 años, falleció en la localidad de Ituzaingó tras sufrir una violenta agresión. La noche del viernes 25 de octubre, Ezequiel había asistido al boliche “The Club”, anteriormente llamado “Club Leloir”, junto con un grupo de amigos.
Al finalizar la salida, los chicos se dirigieron a una plaza cercana para esperar un auto que los llevaría a sus hogares. En aquel momento, ocho adolescentes pasaron frente a ellos. Minutos después, dos de estos jóvenes regresaron e iniciaron una pelea contra Ezequiel, quien resultó golpeado en la cabeza. El principal sospechoso, un menor de 14 años, fue identificado y detenido. Según la Justicia, este joven sería el responsable directo del ataque que causó la muerte. El menor fue apresado este domingo, junto a su hermano de 19 y otro chico de 17.
Las cámaras de seguridad y testimonios resultaron determinantes en la reconstrucción de los hechos. Fuentes judiciales señalaron que, del grupo de ocho que cruzó frente a Ezequiel y sus amigos, solo dos regresaron al lugar para iniciar la agresión, incluyendo al menor de 14 años, quien actualmente permanece detenido. “Los encararon y les dijeron: ‘Párense de manos’. Los corrieron para pegarles; el menor de 14 lo agarró a Ezequiel, lo golpeó en la nuca desde atrás y, después, lo pateó cuando ya estaba en el piso y le sustrajo el celular”, señalaron fuentes del caso a Infobae.
Luego de la golpiza, los amigos de la víctima acudieron al boliche en busca de ayuda y avisaron al personal de seguridad. Este, a su vez, contactó al equipo de salud del complejo, que prestó los primeros auxilios a Ezequiel en la plaza. A pesar de la agresión, el joven logró levantarse y volvió con a The Club, donde aguardaron el auto que los trasladaría a la casa de uno de ellos para pasar la noche.
Sin embargo, a la mañana siguiente, alrededor del mediodía, cuando intentaron despertarlo, descubrieron que Ezequiel ya no respondía y fue declarado sin vida minutos después. En un audio que consignó Clarín, uno de los amigos del menor fallecido brindó detalles sobre lo ocurrido aquella noche.
“Salen del boliche y van a esperar el Uber a una cuadra, a la esquina de la plaza. Eran siete sentados en un banco y alrededor había otro grupo de 13 pibes. Se acercaron todos y uno de ellos viene por atrás y le pega en la cabeza con una manopla”, contó. Además, mencionó que Ezequiel no había tenido problemas con nadie dentro del boliche y que el ataque no parecía tener motivo alguno. “Eze queda inconsciente, tirado en el piso. Todos se dieron cuenta de lo que estaba pasando, pero cuando se iban a parar de manos se dieron cuenta de que eran 13. Eran un montón”, agregó.
El domingo 27 de octubre las autoridades realizaron una autopsia, con el fin de determinar con exactitud las causas de la muerte. La hipótesis principal señala que el golpe en la cabeza, aparentemente ocasionado con una manopla, fue el factor determinante. Además, la Policía Bonaerense detuvo al menor de 14 años señalado como principal agresor, junto a su hermano de 19 y otro adolescente de 17, quienes también estarían vinculados al incidente. Sin embargo, la participación específica de estos dos últimos continúa bajo investigación.
El joven de 14 años permanece alojado en un instituto de régimen cerrado, bajo una medida de seguridad impuesta por la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N°1, liderada por Guillermo Rodríguez Rey y avalada por la jueza de Garantías N°2, Cecilia Drago.
“No puede estar ahí más de un año o dos años. Luego, va a recuperar su libertad y no va a tener una condena como tendría un menor punible o un mayor”, explicaron las fuentes judiciales, tal como contó Infobae.
Respecto a los otros dos jóvenes detenidos, la justicia no ha definido su rol específico en el ataque. Las cámaras de seguridad solo captaron el regreso del menor de 14 años y otro acompañante al lugar de los hechos, lo que podría indicar que el grupo restante no participó activamente.
“Realmente no hay un ataque en patota”, informaron fuentes de la Justicia, quienes estiman que, de no hallarse pruebas adicionales que vinculen a estos dos jóvenes, podrían ser liberados en los próximos días. Ninguno de ellos cuenta con antecedentes y su situación procesal permanece a la espera de que se encuentren nuevos elementos.
El caso también incluyó dos allanamientos ordenados por la Fiscalía de Ituzaingó N°2, dirigida por María Alejandra Bonini, en busca de pruebas que permitan esclarecer los hechos antes de transferir el caso al fuero Juvenil.
Durante estos procedimientos, las autoridades confiscaron prendas de vestir y calzado pertenecientes a los sospechosos, que coinciden con los registros de las cámaras de seguridad. Las imágenes captaron el trayecto de los jóvenes hacia la plaza donde ocurrió la agresión y su regreso a una vivienda ubicada en la zona de Udaondo alrededor de las 5:34 a.m., aparentemente tras cambiarse de ropa.
Los investigadores sostienen que las grabaciones de las cámaras de seguridad refuerzan la hipótesis de que el menor de 14 años fue quien cometió la agresión contra Ezequiel. El ataque se produjo en una plaza conocida como Parque Hermoso, ubicada en la intersección de las calles Los Potros y Patricias Mendocinas, en Ituzaingó, donde Ezequiel y sus amigos aguardaban el transporte que los llevaría de vuelta a sus domicilios.