Gustavo Gonzalo Zárate, un hombre de 44 años, fue asesinado de un tiro en la cabeza hoy lunes a las 2 AM en la esquina de Pilcomayo y Avenida de Mayo, en la zona de Villa El Libertador de la capital de Córdoba, según confirmaron fuentes policiales a Infobae.
La Policía provincial descubrió el hecho tras un llamado al 911, Los efectivos que llegaron al lugar encontraron a Zárate ya muerto sobre el asfalto; personal médico de la línea 107 que llegó luego en ambulancia constató su muerte. Los policías entrevistaron en el lugar del hecho a un testigo clave, un joven de 21 años que aseguró que se encontraba en un kiosco del lugar esperando un remise junto a la víctima y otro amigo, que dejó el lugar y del que no aportó datos. Entonces, llegó una pareja a bordo de un Peugeot 206 gris. Un hombre descendió del auto, ejecutó a Zárate, volvió a ingresar al vehículo y escapó.
Al lugar también llegó un joven de 20 años, que aportó una curiosa versión. Aseguró que, poco antes del crimen, Zárate se encontraba con su hermano mayor en una casa de la zona, bebiendo con el hombre que esperaba el remise junto a la víctima. El joven de 20 implicó al primer testigo en un robo en su casa, por lo que fue detenido.
Por lo pronto, la fuerza cordobesa descubrió que una cámara de seguridad municipal filmó partes de la secuencia que llevaron al crimen: las imágenes muestran a Zárate con el hombre arrestado y al Peugeot 206 circulando por la calle Pilcomayo desde el norte hacia el sur.
La hipótesis, para la Policía de Córdoba, es evidente: el crimen tiene la típica mecánica de un ajuste de cuentas. Si está relacionado con el robo, donde los delincuentes se alzaron con una bicicleta BMX cromada y un celular, entre otros objetos, aún se desconoce. Zárate, según registros previsionales consultados por este medio, era un ex empleado de una firma alimenticia, actualmente sin empleo en blanco, que registraba domicilios en Tanti y en Villa El Libertador. Hubiese cumplido 45 años este miércoles.
Rio Cuarto: otro crimen
Fabián Gómez, un hombre de 33 años, fue ejecutado de dos disparos poco después de la medianoche del sábado último en Rio Cuarto. El hecho ocurrió a pocos metros de la esquina de Miguel Ángel y Ranqueles. Allí, una mujer llegó junto al asesino. Hizo palmas para que Gómez salga, a modo de timbre. Entonces, el asesino, que llegó en una moto, disparó. Gómez fue trasladado al hospital San Antonio de Padua tras ser auxiliado por dos jóvenes que pasaban en una moto, con una bala en la parte izquierda del tórax. Allí, falleció finalmente.
Una vez más, las cámaras de la zona registraron el hecho.