El domingo 12 de septiembre de 2021, en plena jornada electoral por las PASO, tres delincuentes armados entraron a las Galerías Pacífico, rompieron con una maza la vidriera de la reconocida joyería Testorelli y robaron 38 relojes Rolex y Cartier. Tres meses después, el sábado 18 de diciembre pasado, también hombres encapuchados y con armas largas irrumpieron en la joyería Sensation Du Temps del Patio Bullrich. En menos de dos minutos, huyeron con un botín similar: sólo relojes de lujo.
La conexión era obvia. Solo había que encontrar a la banda. Así, la jueza Alejandra Provitola ordenó tareas a la Policía Federal y la Policía porteña, que siguió la ruta de cámaras de seguridad, movimientos de autos y patentes robadas para escapar tras los asaltos. Así, llegaron a una serie de personajes al menos interesantes, literalmente una familia, de apellido Zambrano. El primero fue el menor del clan, Lucas, de 20 años en ese entonces, con domicilio en Vicente López, un cantante de trap amateur. Los policías porteños que revisaban su Instagram se sorprendieron ante una de sus barras: “Cada noche, somos cuatro en un coche”, decía, para luego hablar de “la Glock esperando el remonte”. El tercero fue su primo Gonzalo, nacido en 1987, con domicilio en Villa Martelli.
El tercero fue Mariano José, el hermano mayor de Gonzalo, hoy de 41 años, alias “El Rubio”, hoy preso en un penal federal, donde trabaja por el modesto sueldo tumbero, el primer empleo en blanco en su vida. Era un excelente actor, según los policías que lo arrestaron en enero de 2022. Se vestía con elegancia, para orbitar las joyerías que elegía como blanco, donde entraba y preguntaba precios. La Federal lo detuvo a bordo de una Volkswagen Amarok en Florencio Varela con dos fusiles de asalto -uno FAL, otro tipo M16- listos para disparar, con sus bananas rellenas de balas. Ya tenía una circular roja de Interpol en su contra.
La semana pasada, el Tribunal N°14 porteño, presidido por el juez Gustavo Valle, condenó a los tres Zambrano junto a otros seis cómplices. De los tres, “El Rubio” se llevó la peor parte.
De acuerdo a la condena a la que accedió Infobae, Lucas y Gonzalo recibieron tres años en suspenso por roles menores en el ataque a la joyería de Galerías Pacífico, además de ser acusado de encubrimiento por dos patentes robadas.
Mariano, en cambio, fue condenado por ambos ataques y por la portación ilegal de las armas que le encontraron en la Amarok. Su condena, sin embargo, fue de 16 años, una pena única que computaba dos sentencias previas de dos tribunales orales federales de San Martín, con causas en su contra que databan desde 2013. Su declaración de reincidencia, desde ya, pesó en la balanza.
En la Amarok también viajaba otro supuesto hampón de la banda, Facundo Ortiz Tirabassi. Acusado de los mismos delitos que “El Rubio”, recibió ocho años de prisión. Tirabassi, de 41 años, oriundo de Rincón de Milberg, fue beneficiario de planes sociales y trabajó años atrás en una empresa gastronómica.