A casi una semana de que se conociera que 16 presos se habían escapado de la comisaría 16ª de Rosario, la Policía de Santa Fe confirmó que el sexto evadido volvió a ser detenido en el barrio Tablada. El hombre había sido reconocido por un vecino de la zona, que fue el responsable de dar aviso a las autoridades para que pudieran ponerlo tras las rejas. Los detalles del operativo y el motivo por el que había sido detenido.
El hecho ocurrió este sábado en un domicilio ubicado en las cercanías del boulevard Seguí y Pasaje Guerrico, cuando uno de los residentes del barrio se comunicó con la línea de emergencia 911 para advertir que uno de los hombres que eran buscados por haberse escapado de la dependencia policial se encontraba alojado en una casa del lugar. En efecto, el prófugo fue identificado como Tiziano Ezequiel Lastra, quien había sido arrestado por portar un arma de fuego en septiembre.
Luego de que el ciudadano aportara los datos precisos de la ubicación del fugitivo, un móvil policial se dirigió hacia la propiedad en la que el reo había permanecido refugiado por al menos unos seis días. Para sorpresa de los agentes que estaban a cargo del operativo de recaptura, el detenido habría estado todo este tiempo a unas siete cuadras de distancia de la comisaría 16ª que se sitúa sobre la calle Ayacucho al 3300.
Según la información proporcionada por Rosario3, el prófugo se resistió a la detención, por lo que habría intentado escaparse de los oficiales cuando los vio arribar a la vivienda. A pesar de los esfuerzos, las autoridades lo redujeron y confirmaron que estaba a disposición de la Justicia otra vez. Asimismo, afirmaron que el aprehendido no regresará a la seccional de Ayacucho, debido a que fue alojado en la comisaría 15ª, ubicada en Sarmiento al 4300, en el barrio Matheu.
La fuga masiva se registró el domingo 13 de octubre, cuando la Policía santafesina informó que tres presos que se habían escapado de la comisaría por la mañana habían sido recapturados, aunque señalaron que todavía había otros 13 presos que se encontraban en libertad. Si bien no se especificó oficialmente la mecánica de la evasión, en el módulo de detención había 52 internos en un espacio con capacidad para 12 reclusos.
Los prófugos que volvieron a ser encarcelados el mismo domingo fueron identificados como Rubén Alexis A., tras fracturarse una pierna al saltar la pared de una vivienda de Alem y Garay; Luciano Fernando R. (33), arrestado en Esmeralda al 3700; y Cristian Nahuel E. (21), quien aparentemente contaba con cómplices para encubrir su escape. Mientras que el miércoles fue detenido Alejandro Zahir G. (21), quien fue identificado en la calle Campbell al 3900, el jueves fue recapturado Jonatan Leonel Z. durante un operativo realizado por la Gendarmería Nacional en Empalme Graneros.
De esta manera, las autoridades señalaron que los diez presos que aún son buscados por evadir a la Justicia serían Joel Damián Duarte (30); José Sebastián González (39); Héctor Emanuel Coria (31); Miguel Fabián Larroza (31); Elia Joel Zimmer (21); Elian Nicolás Oliva (25); Rodrigo Leandro Sosa (21); Emanuel Eduardo Rezzio (33); Hugo Joel Castellano (23) y Jonatan Nahuel Gotia (25).
Frente a lo ocurrido, el secretario de Análisis y Gestión de la Información, Esteban Santantino, reconoció que “hay una deficiencia en materia de infraestructura que es lo que vimos también en otras comisarías”, por lo que planteó la necesidad de avanzar en la ampliación de los módulos para que estos puedan recibir más cantidad de personas. Asimismo, explicó que la sobrepoblación carcelaria sería producto de “los resultados que demuestra el personal policial” y remarcó que “es preferible tener que responder y resolver estos problemas que tener los problemas en la calle”.
“Seguiremos mejorando algunos módulos de detención y cambiando lo que haya que cambiar en el sistema. Hay que resolver mientras se sigue trabajando porque la opción de parar para resolver no la tenemos”, apuntó el funcionario al recordar que el plan de infraestructura que puso en marcha el gobierno santafesino, por el momento, se enfocó en ampliar la cárcel federal de Coronda, ya que serviría como punto de traslado de algunos presos que se encuentran detenidos en las comisarías.