Elevaron a juicio la causa contra la “Toretto” de La Plata que atropelló y mató a un motociclista en una picada

Lo decidió la jueza Marcela Garmendia. Sin embargo, la defensa de la joven de 20 años avisó que apelará la decisión de la magistrada

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Accidente en La Plata: una mujer cruzó el semáforo en rojo y mató a un joven motociclista

El recorrido judicial de Felicitas Alvite empieza a tener un horizonte. Es que, en las últimas horas, la jueza Marcela Garmendia elevó a juicio oral la causa contra la joven de 20 años acusada de haber atropellado y matado a un motociclista mientras, presuntamente, corría una picada con otro vehículo. Hace pocos días, la misma justicia provincial le había negado la prisión domiciliaria, por lo que llegará al debate oral presa en la alcaidía de Melchor Romero.

Apenas conocida la resolución de la magistrada, quien consideró que ya no había más nada por investigar, Infobae se comunicó con el abogado de la acusada, Flavio Gliemmo, quien aseguró que va a apelar la resolución. “Consideramos que existen nulidades y que debe ser cambiada la calificación”, aseguró el letrado.

La calificación del hecho, en este expediente, es crucial. Es que, para el fiscal y la jueza, la calificación adoptada es la de homicidio con dolo eventual. Es decir, que Alvite debería haberse representado que corriendo una picada podría haber matado a alguien. Esa imputación tiene una pena prevista de 8 a 25 años. Sin embargo, para su defensa, esa acusación es exagerada y debería ser acusada por un delito culposo, es decir, que lo hizo sin querer donde la pena se reduciría considerablemente.

El 14 de abril de este año, Felicitas Alvite embistió y mató al motociclista Walter Armand, que circulaba por las calles de La Plata. La joven manejaba un auto que no le pertenecía y, según se sospecha, estaba corriendo una picada. Luego de algunos días de investigación y de una fuerte presión mediática, Alvite fue detenida y trasladada a Melchor Romero.

Felicitas Alvite
Felicitas Alvite

Durante esos días, se conoció una publicación de sus redes sociales, anterior al hecho, donde se hacía llamar la “Toretto”, en alusión al icónico personaje de la saga “Rápido y furioso”.

En su resolución, la jueza escribió: “Elevar la presente causa a juicio en relación a Felicitas Alvite por el delito de homicidio simple con dolo eventual y a Valentina Velázquez, en orden al delito de participación en prueba de velocidad o destreza con un vehículo automotor”.

Velázquez es la joven que conducía el otro vehículo que se ve en las cámaras de seguridad y quien, para los investigadores, corría la picada con Alvite.

Hace menos de una semana, la cámara de Casación bonaerense decidió rechazar el pedido de prisión domiciliaria. La votación salió 2 a 1 en contra de Alvite. Los votos que prevalecieron por la negativa sustentaron su decisión en los informes psicológicos y psiquiátricos de la mujer.

El auto que manejaba Felicitas Alvite
El auto que manejaba Felicitas Alvite

“Muestra escasa implicancia en su proceder, manteniendo en distintas oportunidades de la entrevista una actitud exculpatoria sobre los hechos que se le imputan, brinda infructuosos ejemplos que solo logran a los ojos de los entrevistadores dar cuenta de su inmadurez en su accionar”, dice la pericia.

Y siguió: “Tales circunstancias no se han visto modificadas en las distintas situaciones por las que ha atravesado desde el comienzo de la presente causa penal resultando dicho posicionamiento llamativo, mostrando durante cada uno de los encuentros su incapacidad para implicarse en los hechos de los que fue protagonista y desplegando un relato prestado, acomodado a su situación procesal sin la resonancia afectiva que se esperaría en su situación”.

Según fuentes judiciales consultadas, una vez que se resuelva la apelación de la defensa, se fijará una fecha para el juicio. Es probable que sea, con suerte, en el segundo semestre del 2025.

En el escrito de 36 páginas al que accedió Infobae, la jueza Garmendia sustenta su posición de que Alvite y su amiga estaban corriendo una picada: “Cabe señalar que, si bien en vehículos separados, ambas y junto a otros amigos, concurrieron a una fiesta en la que permanecieron hasta que se retiraron de la misma, también, de manera conjunta. Luego, cada una conduciendo sus respectivos vehículos, se encontraron brevemente, ocasión en la que probablemente acordaron el recorrido posterior, tomando parte en una prueba de velocidad”.

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