El Tribunal Oral Federal N°1 de Salta, bajo la modalidad de juez unipersonal, condenó a 6 años y 6 meses de prisión a la suboficial de la Policía Bonaerense que, en febrero pasado, fue detenida cuando su auto estalló con 20 kilos de cocaína, mientras cargaba gas en una estación de servicio de la ciudad de Orán.
Al mismo tiempo, Sofía Esther Chaparro, la policía condenada, fue inhabilitada por el mismo tiempo de la pena acordada entre la defensa y el Ministerio Público Fiscal en un juicio abreviado. El delito del que se la encontró culpable fue transporte de estupefacientes, agravado por la intervención de un funcionario público, en calidad de coautora.
En la sentencia -dada a conocer el 27 de agosto pasado-, el juez Mario Marcelo Juárez Almaraz dispuso también el decomiso del automóvil Ford Focus que explotó antes de que se llevara adelante la maniobra, de la que también está acusado de participar la pareja de Chaparro, identificado como Fabián Giménez, sobre quien se lleva adelante un proceso penal similar.
La investigación estuvo a cargo de la fiscal interina de la Sede Descentralizada de Orán, María del Carmen Núñez.
El hecho ocurrió el 7 de febrero de este año, alrededor de las 23.30, cuando la imputada, que circulaba en un Ford Focus junto a tres hijos menores de edad, ingresó a la estación de servicio Géminis Gas S.RL., ubicada en la intersección de la avenida Palacios y calle Nahuel Huapi de la ciudad fronteriza.
Luego de descender del vehículo con sus hijos, Chaparro le pidió al playero la carga de GNC por 1.500 pesos. En ese momento, se produjo una fuerte explosión en la parte trasera del auto a instantes de iniciar la recarga de gas. Toda la secuencia quedó registrada por las cámaras de seguridad de la estación de servicio.
Como consecuencia del estallido, el lugar fue invadido por una nube de polvo blanco que quedó suspendido en el aire hasta caer al piso, donde también quedaron los paquetes rectangulares desperdigados.
Tras el alerta al Servicio de Emergencia, los menores, de 9, 13 y 14 años fueron auxiliados. Incluso, uno de ellos sufrió una lesión ocular, aunque de carácter leve, por los vidrios que estallaron. Fuera de peligro, fue traslado al Hospital San Vicente de Paul.
En tanto, la mujer fue detenida y los investigadores determinaron que ostentaba el grado de sargento en la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Sobre el motivo del viaje, sostuvo que lo hizo con la finalidad de que sus hijos tuvieran contacto con su padre, de quien se había separado recientemente y residía en la ciudad de Colonia Santa Rosa, en el departamento salteño de Orán.
Como resultado de las pericias, se estableció que la cocaína, con un peso estimado en más de 20 kilos, iba oculta dentro del tubo de gas del auto, que, a su vez, presentaba una costura de soldadura precaria y vestigios de pintura fresca.
Por la dimensión del tanque de GNC, los peritos estimaron que, en su interior, se podían ocultar diez paquetes de droga. También se determinó que, a raíz de la explosión, el tubo se partió en dos: una parte que fue a parar a una calle colindante, y la otra quedó en la misma playa de abastecimiento.
En virtud de la contundencia probatoria reunida, según informó el Ministerio Público Fiscal, a través del sitio Fiscales, la defensa de Chaparro solicitó resolver la causa mediante un acuerdo de juicio abreviado. El mismo fue homologado por el juez Juárez Almaraz, tras escuchar la conformidad de la acusada y su defensa, tanto respecto a la condena, como así también al decomiso del vehículo utilizado para transportar la droga.