Un hombre manejaba borracho y atropelló a un grupo de policías en Córdoba: hay dos agentes heridos

El episodio ocurrió esta madrugada. El conductor dio positivo de alcoholemia tras impactar contra cuatro motos de la fuerza local y quedó a disposición de la Justicia

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Un hombre chocó borracho a
Un hombre chocó borracho a agentes de la Policía de Córdoba

Un grupo de agentes de la Policía de la provincia de Córdoba fue víctima este martes de un accidente vial. El episodio ocurrió en horas de la madrugada, cuando un hombre que circulaba borracho colisionó contra una parada preventiva que realizaba el personal de la fuerza en el barrio Alberdi, dejando dos hombres heridos.

El conductor, que tiene 46 años y quedó a disposición de la Justicia, circulaba a bordo de un Chevrolet Corsa cuando embistió a cuatro motocicletas policiales que se encontraban paradas en la calle 9 de Julio al 1000.

A pocos metros estaban los efectivos que conducían los rodados, quienes se vieron afectados por el incidente. La reconstrucción de las circunstancias del choque aún están en manos de las autoridades. Por caso, los investigadores intentan determinar si el hombre viajaba a alta velocidad o si sufrió algún desperfecto técnico el auto, más allá de su estado etílico, que provocó su desvío en dirección hacia la vereda.

A pesar de la magnitud del impacto, que dejó parcialmente dañadas las motos de la Policía marca Honda Tornado XR250 cc, solo dos agentes sufrieron lesiones. Según informaron fuentes policiales, ambos resultaron con politraumatismos y fueron derivados al Policlínico Policial para recibir asistencia médica, aunque están fuera de peligro.

En consecuencia, el hombre que provocó el episodio fue sometido a un test de alcoholemia efectuado por efectivos de Policía Caminera cordobesa, el cual arrojó resultado positivo. Por este motivo, el conductor quedó aprehendido y la Justicia determinará su situación.

El siniestro ocurrió semanas después de un hecho similar ocurrido en la provincia, aunque de mayor gravedad. El escenario fue la Ciudad de Córdoba, donde un automovilista perdió el control de su auto y atropelló a más de una decena de personas, entre mujeres, hombres y niños, en los 300 metros que recorrió. Incluso, la última cuadra la hizo por la vereda.

Aquel suceso dejó 15 heridos, de las cuales uno estuvo grave. Se trata de una mujer que sufrió la amputación de una pierna. El conductor del coche descontrolado, por su parte, recibió asistencia médica con custodia policial.

Todo culminó a metros del cruce de Chacabuco y bulevar Arturo Illia. Según se supo, el automovilista circuló casi 300 metros a toda velocidad, arrollando autos y lo que tenía por delante. Los testigos indicaban al conductor del Toyota Corolla como el principal responsable del siniestro vial: no sólo embistió varios vehículos, sino que atropelló a más de una decena de transeúntes. En total, fueron 35 las personas afectadas.

El hombre perdió el control
El hombre perdió el control del Corolla y atropelló gente a su paso.

La causa quedó en manos del fiscal José Bringas, de la Fiscalía de Instrucción del Distrito 1 Turno 6, quien dispuso la aprehensión del hombre de 68 años que conducía el vehículo que provocó el grave accidente en pleno centro de la ciudad de Córdoba. Podrían endilgarle el delito de lesiones culposas gravísimas, según fuentes judiciales. Las principales hipótesis de las autoridades se basan en la posibilidad de que el hombre haya sufrido una descompensación o si su vehículo tuvo algún desperfecto.

En el lugar se vivieron momentos de desesperación y tensión. Videos filmados por testigos y que comenzaron a circular en las redes sociales muestran a las víctimas siendo asistidas. En las imágenes también se observa al hombre de 68 años en el interior de su Toyota Corolla, que terminó cruzado sobre una vereda tras estrellarse contra una moto y otro auto.

Varias personas se le acercaron de inmediato y comenzaron a insultarlo. “¿Andás alcoholizado? ¡Hijo de puta!”, le gritó un hombre. “Te tenías que haber matado”, vociferó otro que lucía desencajado, y lo desafió: “Salí, hacete el justiciero”. En medio del alboroto, las víctimas eran asistidas a la espera de la llegada del personal médico, mientras los policías trataban de calmar a los más enfadados.

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