El abogado Juan Pablo Gallego tuvo su máximo logro profesional cuando logró como querellante la pena de 15 años de prisión dictada contra el cura Julio César Grassi por dos hechos de abuso sexual cometidos en la Fundación Felices Los Niños. El cura, en el proceso, había contado con una defensa de abogados de vasta trayectoria en tribunales y de figuras mediáticas de renombre. También, de la Iglesia. Por esa razón, para Gallego se trató de una pelea judicial al estilo David y Goliat.
Ahora, 15 años más tarde, el abogado enfrenta un nuevo desafío: representará a los padres de Loan Peña, en la causa que busca esclarecer su desaparición, en el pequeño pueblo 9 de Julio, en Corrientes, donde fue visto por última vez el 13 de junio, hace más de 100 días.
Como si se tratara de un libro de Agatha Christie, el misterio comenzó a crecer en torno a las ocho personas que asistieron a un almuerzo en ese punto del mapa. Hasta el momento, no se encontró ninguna llave que permita avanzar sobre una hipótesis firme.
El expediente estuvo, durante 11 días, en manos de la Justicia provincial, que no logró resolver el enigma y dejó varios puntos inconclusos, para declararse incompetente. Desde entonces en manos de la jueza federal de Corrientes Cristina Pozzer Penzo, quien repitió pericias y toma de testimonios por la fuerte sospecha de una investigación viciada desde el inicio, las cosas no avanzaron demasiado, aunque en los últimos días hubo diez sospechosos detenidos por entorpecer la causa, ligados a la Fundación Dupuy. Poco después, Ramón Dupuy, abuelo del nene abusado y asesinado en La Pampa, se despegó del grupo.
Ese es el contexto que afrontará Gallego, según él mismo aseguró a Infobae, por pedido de Noguera y Peña, quienes lo convocaron tras la salida de Fernando Burlando de la querella. “Me contactaron los padres de forma directa, ellos quieren encontrar a su hijo. Están sufriendo mucho. Todo esto me empujó a representarlos”, afirmó. “Venía siguiendo de cero y me llamó la atención que, cuando el caso se encaminaba a resolverse, los fiscales provinciales pidieron la incompetencia. Desde ese momento, comenzó una frivolización del caso y un entorpecimiento de distintos actores. De esta manera, por ignorancia, negligencia o interés, se han perdido 100 días”.
“No es usual que un caso tenga el consenso general y esté en la mira de los grandes medios. En lugar de aprovechar ese impulso, se generaron mil hipótesis que no llevaron a nada. Hubo más efectismo que efectividad”, remarcó sobre los procedimientos de búsqueda y rastrillajes. “No todos los hechos tienen la espectacularidad que se le busca dar, la solución puede ser la más simple. Se barajó esa hipótesis, pero no se llegó al final”, señaló y cuestionó la participación de alguno de los involucrados, sin nombrarlos:
“Hay gente que fue a hacer turismo, a colgarse del caso”.
“Muchas cosas que se decían no se corresponden con la investigación de los últimos 70 días. Hoy, la jueza sigue trabajando la causa, con menos espamento alrededor”, señaló el abogado que fines de agosto pasado, le ganó otra batalla a Grassi, cuando el Tribunal en lo Criminal N°1 de Morón denegó el pedido del religioso para acceder al beneficio de la libertad condicional tras haber estado encerrado 11 de los 15 años de condena.
En tanto, María Noguera y José Peña presentaron en un video que circuló en redes a su nuevo abogado. “100 días sin Loan, pasó de todo: se perdió el tiempo, se nos mintió, se nos maltrató, pero seguimos unidos, fuertes para buscarlo. Hoy, más que nunca, renace nuestra fuerza, confiamos en el doctor Juan Pablo Gallego, que nos acerque la verdad, también en la Justicia, que más necesitamos”, dicen entre ambos, sentados en delante de una mesa y las manos en cruz.