Un agente de la Policía Federal fue víctima de un intento de robo en la noche del jueves: un grupo de delincuentes lo atacó cuando regresaba a su domicilio en la localidad de Gregorio Laferrere, en el partido de La Matanza. El efectivo se resistió, se produjo un tiroteo y mató a uno de los ladrones. Para el fiscal que interviene en el hecho, en principio se trata un caso de legítima defensa.
El policía, de 27 años, cumple funciones en la División de Servicios Generales de la Escuela de Cadetes. Anoche, encontrándose fuera de servicio, fue abordado por tres hombres armados en el momento en que estaba por ingresar a su casa. Según el reporte policial, al verse amenazado, el oficial se identificó y desenfundó su arma reglamentaria para defenderse del asalto.
Lo que siguió fue un intercambio de disparos. Durante el enfrentamiento, uno de los delincuentes recibió un balazo en la zona del cuello y cayó al suelo, mientras que sus cómplices se dieron a la fuga. Posteriormente, los médicos que trabajaron en la escena constataron el deceso. En tanto, el policía resultó ileso.
El fallecido portaba un revólver Pasper Bagual 22 largo. De acuerdo con lo que pudo saber Infobae, no llevaba documentación entre sus pertenencias y hacia esta noche todavía no había sido identificado, por lo que se aguardaba la autopsia de rigor para saber quién era y si contaba con antecedentes.
Después del suceso, se desplazaron al lugar varias autoridades, entre ellas el director de la Escuela de Cadetes, el jefe de Estudios, y representantes de los servicios de apoyo al personal policial y sus familias. También acudieron miembros del Departamento de Control de Integridad Profesional y de la División de Unidad Operativa Federal Morón.
La investigación del caso quedó en manos del fiscal Adrián Arribas, de la Unidad Funcional de Instrucción de Homicidios de La Matanza. Fuentes con acceso al expediente comunicaron a este medio que, a partir de las primeras pruebas recolectadas, el funcionario judicial no adoptó temperamento contra el policía. Las testimoniales y las evidencias aportadas por el personal de Científica lo llevan a considerar, hasta el momento, que el agente actuó en legítima defensa.
Mientras la causa avanza, las autoridades continúan adelante con la reconstrucción de lo sucedido y siguen trabajando para identificar y capturar a los otros dos asaltantes que lograron huir.
El fiscal Arribas también está al frente de otro expediente por un tiroteo que tuvo lugar en una zona de boliches de San Justo e involucra a un policía de la Bonaerense, quien mató a un hombre que le había disparado no solo a él, sino también a otros efectivos que realizaban tareas de seguridad.
Esa violenta secuencia se produjo durante la madrugada del domingo 8 de septiembre sobre la Avenida Brigadier General Juan Manuel de Rosas -conocida simplemente como Ruta 3 entre los lugareños-, a la altura del cruce con la calle Ambrosetti. La cámara de vigilancia de un kiosco captó la escena. En las imágenes se escuchan los insultos de tres sujetos que encararon a los policías, quienes custodiaban la salida de uno de los locales bailables.
En medio de una gresca, el tirador, Pablo Correa Veliz, de 34 años, sacó un revólver y disparó contra los uniformados. La respuesta de uno de los oficiales fue instantánea. Utilizando su arma reglamentaria, hirió a Correa Veliz en la cabeza y el abdomen. En el video se ve el momento en que el hombre cayó al asfalto tras ser impactado por los proyectiles. Murió poco después en el Hospital Paroissien. Durante la balacera, además, una sargento fue herida en una pierna.
Arribas no tomó ninguna medida contra el policía, al considerar que actuó en legítima defensa.