La Justicia de Rosario investiga la muerte del recién nacido que el pasado sábado fue dejado en una caja de cartón en una plaza de la zona noroeste de Rosario. El fiscal Adrián Spelta, a cargo del caso, ordenó la detención de la mamá, una joven de 21 años que está internada en un sanatorio y que podría recibir el alta médica en las próximas horas. La decisión fue tomada luego de que un grupo de profesionales determinara que la mujer, identificada como Victoria D., está en condiciones de comprender la criminalidad de sus presuntos actos y que no se encuentra en un contexto de vulnerabilidad.
El fiscal pidió llevar audiencia a la mujer en el Centro de Justicia Penal ni bien pueda salir del sanatorio, probablemente para acusarla del delito de abandono de persona seguido de muerte. Antes, la joven volverá a ser revisada por un equipo de profesionales de la salud, según indicaron a Infobae investigadores judiciales.
De las primeras medidas solicitadas por Spelta, se pudo establecer que Victoria D. no quedó embarazada producto de un abuso sexual y que sus familiares no tenían conocimiento de la situación.
De acuerdo a la reconstrucción del hecho, el sábado un vecino encontró al bebé en una caja en Casilda entre Liniers y Teniente Agneta, en una pequeña plaza donde hay bancos de cemento, un sube y baja, un tobogán y hamacas, y comenzó a pedir ayuda. Un grupo de personas que vio pasar un móvil policial, frenó el vehículo y entregó al menor envuelto en una manta.
El menor, que tenía el cordón umbilical, estaba frío y con bajos signos vitales, fue asistido por dos suboficiales del Comando Radioeléctrico que lo trasladaron al Hospital de Niños de Rosario mientras le hacían masajes de reanimación cardiopulmonar.
En el hospital, el bebé fue llevado a la unidad de terapia intensiva con un paro cardiorrespiratorio e hipotermia. Allí, se le hicieron maniobras de RCP y se le suministró asistencia mecánica respiratoria. Después de unos minutos, mientras se evaluaba la posibilidad de trasladarlo hasta la unidad Neonatal del Hospital Provincial, que está más equipado para ese tipo de cuadros, falleció.
Personal de la Policía de Investigaciones santafesina secuestró la caja en la que estaba el recién nacido. Y siguió los rastros de sangre que formaban un camino que terminaba en la puerta de una casa, que era la de Victoria D., la madre.
Al consultar por el caso, en el domicilio indicaron que la joven estaba internada desde la madrugada por una hemorragia, pero al ser informados del caso del menor, comentaron que no sabían que cursaba un embarazo.
En febrero pasado, se dio un caso similar en Rosario, cuando un changarín encontró en barrio Martín, cerca del Monumento Nacional a la Bandera, el cuerpo de una bebé de cuatro meses en un contenedor de residuos. En la investigación fue aprehendida la madre, de 18 años, y su pareja, de 23, pero después el hombre recuperó la libertad y la mujer no fue imputada porque se dispuso su internación en un hospital psiquiátrico.
El cuerpo de la niña no tenía golpes ni lesiones externas que hayan sido causales de su muerte, según determinó el informe de la autopsia realizada en el Instituto Médico Legal de la ciudad.