Luego de haber sido reportada como desaparecida, el cuerpo sin vida de la escritora Doris Cappenberg, de 80 años, fue hallado mientras flotaba en la costa del río Dolores, en Córdoba. Hace algunos días había realizado una millonaria transacción y nada más se supo de ella. Los detalles detrás del macabro hallazgo y el misterio que rodearía al crimen que conmocionó al Valle de Punilla.
Todo ocurrió el viernes por la tarde, después de que las autoridades recibieran una denuncia sobre la presencia sospechosa de varias bolsas de consorcio en la costa del río Dolores, entre las localidades de Capilla del Monte y San Esteban. Una vez que los agentes policiales se presentaron en el lugar constataron que se trataba de la mujer desaparecida.
La escritora llevaba varios años radicada en Capilla del Monte, en donde vivía en un domicilio del barrio 9 de Julio. Según lo que trascendió, la mujer había sido reportada como desaparecida por sus familiares, cuando había acudido a realizar una transacción comercial.
Previo a esto, los familiares de la víctima habían declarado que, para completar el trámite que tenía pendiente, debía cambiar una gran suma de dólares. Y, de acuerdo con la información a la que accedió El Diario de Carlos Paz, los investigadores creen que la mujer podría haber llamado la atención de sus captores.
La causa fue asignada a la Fiscalía de Cosquín, a cargo de la fiscal Paula Kelm, en donde plantearon la posibilidad de que Cappenberg hubiera sido secuestrada y torturada, para después apoderarse del dinero que cargaba. Pues, al retirarse el cuerpo de las bolsas, los agentes descubrieron que tenía signos de violencia.
Por el momento, no habría ningún sospechoso bajo la mira de los investigadores, más ya se ordenaron una serie de medidas para dar con el paradero y conocer cómo fueron los últimos momentos con vida de la escritora. Asimismo, señalaron que en la zona se encontraron huellas de un vehículo, que podría haberse tratado del mismo que se utilizó para descartar los restos de la víctima.
Acerca de la trayectoria de la autora, se conoció que hasta el momento de su muerte contaba con tres obras editadas tituladas como “Satsang”, “Vínculos” y “Hágase tu voluntad”. Incluso, era reconocida en el ambiente por ser una de la referentes argentinas de la escritura saibabenses, la cual está inspirada en el fallecido gurú indio Sathya Sai Baba, quien es considerado como un santo y encarnación de Shivá, el dios hindú de la destrucción, la danza y la meditación.
El amor que había desarrollado por el líder religioso la llevó a visitar la India, en donde consagró el lazo que la unía al yogui. “Cuando fui a la India, me pasaron muchas cosas y estuve dos meses la primera vez. Cuando volví iba al centro de Sai Saba y la gente daba ‘satsang’ que quiere decir testimonio”, contó en una entrevista que brindó en 2022 para el youtuber Adrián Maggi sobre cómo nació su primer libro publicado.
“Me era muy difícil contar el sentimiento y hablar de Baba porque todavía no lo tenía claro. Lo único que sentí fue una gran responsabilidad. Lo ví y lo único que hacía era llorar”, recordó sobre ese freno que la llevó a poder explayarse a través de las palabras. A partir de esa experiencia transformadora, la autora reveló que fue un antes y un después para ella, por lo que dedicó el resto de sus días a difundir la palabra y las creencias que impartía Sai Saba.