El patólogo de la Morgue de Moreno-General Rodríguez lo vio de inmediato en la mesa: un traumatismo de cráneo causó la muerte de Osvaldo Devesa, el jubilado de 72 años oriundo de la zona de Villa Sarmiento que estaba desaparecido desde el viernes, hallado muerto ayer jueves en una casa en José C. Paz, jurisdicción de Moreno.
Su cadáver, confirmaron fuentes del caso, estaba enterrado bajo una losa.
El estudio al cuerpo, por otra parte, reveló que Devesa no murió de inmediato. La autopsia probó que Devesa sufrió una marcada agonía antes de fallecer. Cuánto duró ese período, por lo pronto, se desconoce. También se desconoce la data de muerte exacta, cuándo fue asesinado el jubilado: la tierra y el cemento que cubrían el cuerpo, explicaron expertos, afectaron el proceso de descomposición. Lo que la fiscal que investiga el caso, Adriana Suárez Corripio, tiene por cierto, es que Devesa llegó a la casa donde fue asesinado el viernes mismo que desapareció, cerca de las 21 horas.
José Luis Goyechea, un albañil de 52 años que ocupaba el lugar, fue detenido por la DDI de Morón de la Policía Bonaerense. Se negó a declarar ayer, asistido por un defensor oficial.
Detectives del caso estimaron en un comienzo que Goyechea tenía algún tipo de relación con Devesa, que era paciente oncológico y recibía medicación: Suárez Corripio determinó a través de testimonios que Goyechea había realizado trabajos en la casa de su presunta víctima. Qué pasó, por qué fue a la casa de su victimario un viernes por la noche, queda por verse. La fiscal Suárez Corripio continúa con diversas tareas. El celular de Devesa, confirmaron investigadores del caso a Infobae, sigue sin ser hallado.
La investigación del caso comenzó el domingo último, cuando la hija de Devesa alertó a la Bonaerense sobre la desaparición de su padre. En su denuncia, aseguró que había hablado con él por última vez el viernes. Devesa también estaba en pareja con una mujer: la novia declaró lo mismo, aseguró que el último contacto ocurrió el viernes a las 22, vía WhatsApp. El jubilado se había retirado en su Volkswagen Gol Rojo, para no volver. Poco después, la hija entregó los teléfonos de su padre, mientras la UFI N°8 alertaba a municipios del Oeste y al Anillo Digital de CABA para que busquen rastros del auto.
Poco a poco, se conocieron los movimientos de Devesa. Los detectives hallaron que solía frecuentar un bar en la calle Aranguren en Caballito, a donde había asistido a un evento poco antes. Relevaron, también, sus redes sociales, con el círculo íntimo del jubilado que pedía por su aparición y difundía su imagen para encontrarlo. El relevo de cámaras logró la primera imagen: el Gol fue visto el 7 de septiembre ya en Moreno. Esa misma madrugada, había pasado por una estación de servicio YPF en Ituzaingó. El auto fue remolcado hacia Moreno desde la YPF por una camioneta Renault Sandero, de la que se detectó la patente.
El conductor de la Sandero que realizó el remolque era, precisamente, un tío de Goycochea. El tío, lejos de cubrir a su sobrino, entregó el domicilio en Moreno donde vive. El Gol fue finalmente hallado en Moreno, en la esquina de Quintana y Díaz Vélez.
Poco después, los policías fueron por la casa de Goyechea en la calle Luján Sierra, en José C. Paz. Al entrar al lugar, la Bonaerense encontró el Gol de la víctima en la cochera y un contrapiso con el cemento todavía fresco. Lo taladraron: el cadáver de Devesa estaba allí, con manchas de sangre en su ropa y su cabeza.
La escena del crimen habr´ía sido la casa de Goyechea mismo. Allí, el test de reactivos detectó manchas de sangre en la pared y en el apoyabrazos de un sillón. Se incautó una maza, también con restos de sangre, la presunta arma con la que mató al jubilado.
El crimen resuena con el caso de Estrella Fernández, la jubilada española hallada muerta ayer en su propia casa en San Martín. Su cuerpo estaba dentro de un tambor de petróleo de 200 litros, bajo una capa de tierra y cemento. Su nieto, Lucas Pedraza, fue detenido por el crimen. También habría matado a golpes a su abuela. El arma, esta vez, fue una estatua de madera con la forma de un búho, una artesanía.