Luego de tres días, la Policía de la Provincia de Buenos Aires logró detener a Pablo Ezequiel Abraham Da Silva, el acusado del femicidio de María Morales ocurrido el martes último en la localidad bonaerense de Moreno.
La detención se produjo este sábado en la casa de un amigo de Da Silva en José C. Paz donde se encontraba oculto desde que cometió el femicidio de Morales.
Todo comenzó cuando luego de una entrevista del personal de la DDI de Moreno-General Rodriguez, con la hermana de Da Silva, esta reconoció haber discutido meses atrás con él por su problema de adicción por lo que lo hecho de su domicilio y que actualmente sabe que se encuentra en situación de calle, desconociendo su paradero actual.
Tras investigar un celular, los efectivos lograron la localización del detenido en una vivienda de la localidad de José C. Paz. Tras ello, desde la DDI, implementaron un operativo de observación sobre el lugar, donde al detectar la presencia Da Silva e hicieron después la efectiva detención. En el lugar, además, se secuestró un teléfono celular, dos tarjetas SUBE y ropa utilizada el día de los hechos (compatible con imágenes fílmicas).
Es de destacar que fue la hija de la víctima quien logró identificar al detenido. La joven aseguró que su madre pactó un encuentro en su casa con un hombre llamado Ezequiel, quien tendría unos 25 años de edad, era de contextura física delgada, tenía pelo negro con claritos rubios, poseía un tatuaje en el cuello y sería del Barrio Casasco de Moreno. Además, sostuvo que habría tenido problemas de adicción, por lo que en algún momento se hizo tratar en un centro para adictos y que se conocieron a través de una aplicación de citas.
Con esta información, el personal de la DDI realizó relevamiento de cámaras privadas y municipales, como así también estuvo recorriendo algunos centros para adictos de este ámbito, arrojando resultado negativo.
Fue por ello que se continuaron las tareas de investigación en bases de datos y redes sociales, procurando individualizar al hombre sindicado por la hija de la víctima, lo que llevó a lograr la individualización del detenido.
Cabe recordar que Morales, de 51 años, fue hallada asesinada en su casa de Moreno por un hombre había conocido a través de una aplicación de citas.
El crimen fue descubierto luego de que la hija de la víctima se comunicara con la Policía, preocupada porque su madre no respondía mensajes ni llamadas.
La escena con la que se encontraron los efectivos fue particularmente violenta: la mujer había sido brutalmente golpeada y estrangulada. Además, el cuerpo tenía signos de abuso.
El hecho ocurrió el martes pasado, en una propiedad ubicada en la calle Newton, donde Morales vivía sola. De acuerdo a los investigadores, el cuerpo se encontraba a un costado de la cama, estaba desnudo en su parte inferior y tenía el rostro cubierto por una sábana que tenía aparentes manchas de sangre. Al mismo tiempo, había desorden en los ambientes de la casa y se comprobó que faltaban algunos objetos, entre ellos el celular de la mujer.
La autopsia confirmó más tarde que la causa de muerte fue asfixia mecánica, producida por estrangulación manual y a lazo. Al mismo tiempo, los forenses encontraron signos compatibles con abuso sexual e identificaron múltiples lesiones de lucha: Morales tenía golpes en distintas partes del cuerpo, indicios de un intento desesperado por defenderse de su atacante. Los detectives creen que lo habría dejado entrar de manera voluntaria, debido a que no había ninguna abertura forzada.
En la causa intervino el fiscal Federico Soñora, quien reemplaza de forma temporaria a Luisa Pontecorvo, en la Fiscalía Nº 3 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez.