La historia nunca contada de la escort argentina asesinada a tiros y puñaladas en un hotel de México

Karen Ailén Grodzniski, prostituida en el sitio Zona Divas, fue hallada muerta en diciembre de 2017. Los últimos chats con su madrastra, la investigación inédita de la Justicia y el nuevo documental de Netflix

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Karen Ailén, en una foto tomada semanas antes de su muerte
Karen Ailén, en una foto tomada semanas antes de su muerte

El 26 de diciembre de 2017, un día después de Navidad, Karen Ailén Grodzinski tomó su teléfono en algún lugar de la Ciudad de México y le escribió por WhatsApp a su madrastra. El vínculo entre ambas era fuerte. “Mi hija mayor”, ella llamarla la madrastra. La mujer era, para Karen, oriunda de la ciudad chaqueña de Presidente Roque Sáenz Peña, alguien en quien confiar. Había dejado Sáenz Peña dos años antes, el 13 de agosto de 2015, poco después de terminar el secundario, luego de que murió su perra. Aquí, cobraba un plan para acceder a una garrafa. Pero la joven nunca le explicó a su familia qué es lo que hacía en México DF. Decía que estaba casada con un joven mexicano apodado “Charly” a quien su familia chaqueña apenas por fotos, Juan Marcelo, su padre, ni siquiera sabía el apellido de su yerno.

La joven chaqueña estaba aterrada en aquel chat con su madrastra. Las cosas, en su mundo, se estaban poniendo graves.

Poco menos de un mes antes, la Policía mexicana había encontrada muerta en la capital nacional a Génesis Gibson Jaimes, de 24 años, oriunda de Venezuela, que trabajaba como escort, una trabajadora sexual del circuito local. Su cuerpo fue hallado en la habitación 107 del hotel Platino, en la zona de Venustiano Carranza. Aparentemente, se había citado allí con un cliente. Karen conocía a Génesis, era su amiga. Le había perdido el rastro desde febrero, cuando la venezolana había desaparecido. “La acuchillaron y le hicieron de todo y la dejaron asfixiada y muerta, con un moño en el cuello”, le escribió Karen a su madrastra.

Luego, dijo: “Ella era novia de un político. Ni eso la salvó”. Karen nunca le dijo a su madrastra de qué político se trataba. Habló, luego, de sus propios amigos, como de uno “que era de un cartel poderoso y era muy fuerte en México. Salió de la cárcel que él manejaba como un rey y lo mataron. Aquí no se salva nadie”.

El hotel Revolución, donde Karen fue asesinada
El hotel Revolución, donde Karen fue asesinada

Su miedo tenía una explicación. Karen, finalmente, le dijo a su madrastra de qué trabajaba. Le reconoció que era una escort VIP en la capital mexicana, con el seudónimo de Danna Broke. Publicaba sus servicios en el sitio Zona Divas, tal como Génesis, con videos porno que circulaban por internet. Wendy Vaneska de Lima Cortés, otra escort del sitio, había sido asesinada en febrero de ese año.

El 28 de diciembre de 2017, dos días después de ese chat con su madrastra, Karen misma fue encontrada en una habitación del hotel Pasadena, un albergue sobre la avenida Revolución del DF, muerta a tiros y puñaladas. Tenía 24 años. Axel Arenas, un conocido actor, fue detenido al año siguiente por el hecho. Pasó seis días preso y luego fue exonerado: descubrieron que estaba fuera del país al momento del hecho. Daniel “N”, un supuesto sicario ligado a La Unión Tepito, fue condenado a 80 años de prisión por las muertes de Génesis y Wendy.

El asesinato de Karen sigue impune más de cinco años después. La historia de Zona Divas sigue allí, entre las sombras de la trata de personas internacional, del mecanismo que toma a mujeres de un país para prostituirlas a siete mil kilómetros de su casa. Hoy, la historia de Zona Divas es relatada por el documental El Portal, disponible en Netflix, que cuenta las experiencias de cinco víctimas de la plataforma, dirigido por Astrid Rondero y Fernanda Valadez, con filmaciones en Chaco, Miami, Buenos Aires y Maracaibo. La historia de Karen Ailén es una de ellas.

Al tratarse de un caso de posible trata que involucraba a una ciudadana argentina, la PROTEX, con los fiscales Alejandra Mángano y Marcelo Colombo, requirió información para intervenir. El punto de partida para los fiscales argentinos fue, precisamente, un artículo de este medio escrito por el autor de esta nota.

Esa investigación argentina permaneció inédita durante años: este mes, Infobae logró acceder a sus contenidos.

El último chat de Karen con su madrastra, tres días antes de su muerte
El último chat de Karen con su madrastra, tres días antes de su muerte

La PROTEX descubrió que la madrastra no era la única interlocutora. Karen tenía una tía en Rosario, a la que también le había relatado su miedo de morir. Lo mismo le había dicho a un hombre de Sáenz Peña, que manejaba un local de repuestos de auto. Mangano y Colombo recibieron, también, el nombre de la familia Santoyo Cervantes, sospechada de estar detrás de Zona Divas. La Fiscalía de Roque Sáenz Peña, también, había iniciado una investigación por la posible captación de Karen Ailén. Allí declararon su padre, su madrastra, su madre y un amigo.

Juan Marcelo aseguró ante la Justicia de su provincia que jamás supo que Karen se iría a México, solo que estaba en Buenos Aires. Vio, de casualidad, una foto de su hija en un avión. Viajaba con una mujer que, creía, era una amiga de Karen. Nunca creyó que algo pasaba, nunca tuvo indicios. Una de “las chicas que trabajaba con Karen” le había dicho a la madre de Karen que la joven chaqueña intentaba juntar el dinero para volver, pero no lo conseguía.

Poco después de la muerte, un amigo suyo le envió una serie de links: eran las cuentas de Twitter, donde su hija, seguramente controlada por la mafia de Zona Divas, ofrecía sus servicios.

La declaración de la madrastra de Karen fue más llamativa. Allí, aseguró que la joven asesinada “había puesto una agencia con chicas” y tuvo que cerrarla porque estaban pasando “cosas graves en México”. Tiempo antes, Karen hablaba con una de sus hermanastras. Les decía que era “secretaria” y que estaba camino a ser actriz. Aseguró, también, que solo sabía quién le había pagado el pasaje a Karen, “una mujer de Buenos Aires”.

Karen, en otra foto de sus redes
Karen, en otra foto de sus redes

Supo, por otro lado, del último mensaje de su hijastra. Los chats antes de Navidad precedieron a otra conversación por WhatsApp, que ocurrió el día de la muerte misma. Karen le había enviado una foto en bata, la misma que le envió a su marido, Charly, que además de ser chofer de Uber tenía dos comercios: Karen estaba vestida con ropa deportiva cuando fue hallada muerta en el hotel Revolución.

A las 20:30 de ese día, Charly recibió un mensaje en el teléfono: “Ya voy”, decía, desde el celular de Karen. La joven chaqueña tenía dos celulares; uno para hablar con su familia, otro para motivos laborales. Junto a su cadáver no se hallaron ninguno de los dos. El amigo de Karen que declaró aseguró, en cambio, que ella misma se pagó el pasaje, ya que “quería hacer castings”. Mientras tanto, el nombre de otra argentina sobrevolaba el caso, una tal “Mariela”, que habría acompañado a Karen en sus viajes, que sabía que la joven de Chaco había trabajado como escort incluso tras casarse con Charly

La PROTEX intentó obtener información de quién había reservado ese pasaje. La empresa en la que Karen voló aseguró que ya no podía recuperar esa información en sus registros. Se descubrió, luego, que una empresa mayorista con base en Cancún los había adquirido; Mangano y Colombo exhortaron a la Fiscalía de Género mexicana a que obtenga información sobre esta firma. Mientras tanto, Evelyn Romero, la administradora de la web Zona Divas, era detenida en 2018.

Karen Ailén, en otra foto de sus redes
Karen Ailén, en otra foto de sus redes

La pista de “Mariela”, en cambio, dio resultados: se descubrió que Karen y esta mujer volaron el mismo día, el 13 de agosto de 2015, pero en empresas y vuelos separados. Otras cuatro mujeres y un hombre argentino que volaron aquel día recibieron pasajes comprados por la misma empresa de Cancún.

La Justicia mexicana también aportó la sospecha de una posible operadora de Zona Divas, una captadora y fiola, que operaba en DF al menos desde 2011, oriunda de Paraguay, alta, de tez blanca, con un departamento en la Colonia de los Deportes. “Linda”, la llamaron. Su departamento fue vigilado por la Policía azteca en junio de 2017, seis meses antes del crimen de Karen. Allí, vieron a mujeres entrar y salir vestidas con ropa ajustada, a bordo de autos de aplicación. En esa ocasión, siguieron a una mujer hasta el hotel Revolución, el mismo donde Grodzniski fue asesinada.

La vieja web de Zona Divas, hoy eliminada
La vieja web de Zona Divas, hoy eliminada

Los fiscales de la PROTEX viajaron a México a fines de junio de 2018. Allí, sus pares de la FEVIMTRA les señalaron a “Sony” Santoyo Cervantes como uno de los posibles jefes de Zona Divas, con una serie de contratos de “promoción de imagen” ante un escribano. Allí, Mángano y Colombo descubrieron que “Sony” no había sido imputado por trata, sino por promoción engañosa. Oyeron también sobre el “arreglo” de las fiolas y cafishos de Zona Divas con las mujeres explotadas. Una sesión de sexo podía costar 2500 pesos mexicanos. Mil se los quedaba la organización, en concepto de la deuda que tomaban al caer en la red. Otros mil se los llevaba el proxeneta. Los otros 500 les quedaban a las mujeres.

Al año siguiente, en 2019, Edgar Manuel Martínez García, uno de los hombres de Zona Divas, recibió siete años de prisión en un juzgado de Ciudad de México por operar para el sitio web en el DF, Morelos, Puebla y Querétaro. “Yolimar C.”, una fiola y captadora del sitio, fue sentenciada a 30 años en 2021, con compatriotas venezolanas que había captado para prostituir en cinco ciudades aztecas.

La investigación argentina, mientras tanto, se encuentra cerrada hasta que aparezcan nuevos elementos. No se pudieron hallar indicios de que Grodzniski dejó el país coaccionada contra su voluntad. La vieja web de Zona Divas fue eliminada. Quedan capturas de pantalla. Su menú principal tenía lo que hoy parece una ironía, un link sobre “info anti trata”.

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