La localidad bonaerense de El Palomar, en el partido de Morón, se convirtió en escenario de un violento episodio de inseguridad este miércoles por la tarde, cuando cinco delincuentes armados intentaron robarle dos autos a un matrimonio mientras estacionaban en el garaje de su casa.
Muy afectado por lo ocurrido, con la voz quebrada y al borde del llanto, Pablo, una de las víctimas del hecho delictivo, relató el angustiante momento que vivió y cómo, en medio del caos, logró salvar su vida, al igual que lo hizo su esposa. “Fue un milagro. Agradezco a Dios, que puso su mano y corrió la bala, porque venía al pecho”, fueron las primeras palabras del vecino al describir el ataque.
El caso ocurrió a las 18.15 y quedó registrado por dos cámaras de seguridad instaladas en la casa de las víctimas, una en la fachada y otra en el interior de la cochera. Las imágenes muestran que la mujer se disponía a estacionar la Volkswagen Amarok color gris en el interior de su cochera. Sin embargo, en medio de la maniobra detectó que un vehículo de color negro se acercaba de forma sospechosa a su posición y, por ende, decidió detener su marcha.
El instinto no le falló a la vecina, debido a que el automóvil que había visualizado una cuadra antes frenó delante suyo. Con velocidad y sincronización, los asaltantes descendieron del rodado e intentaron abordarla, pero ella, en una arriesgada reacción, giró a la derecha, esquivó a los atacantes y aceleró para escapar, mientras Pablo, dentro del garaje, también se encontraba bajo amenaza.
“Entré, me bajé de la camioneta, acomodé el cochecito del bebé y le hice señas a mi señora para que entrara con la camioneta. En ese momento, ella se percató de que venían los ladrones en el vehículo”, explicó Pablo en declaraciones a TN. A pesar del peligro inminente, la conductora reaccionó rápidamente y logró esquivar el peligro.
En cuanto se dio cuenta de la situación, Pablo intentó protegerse, pero los delincuentes se le abalanzaron. “Cuando veo a los ladrones, vuelvo a la camioneta y me apuntaron. Me dijeron: ‘Quedate quieto’. Arranqué como pude la camioneta y pensé: ‘A estos los paso por arriba. No me queda otra. Son ellos o soy yo’, relató con evidente angustia. En medio de la desesperación y sin saber lo que había pasado con su esposa, decidió acelerar su propio vehículo, un Volkswagen T-Cross, y salir del lugar a toda velocidad.
Antes de emprender la fuga, uno de los asaltantes disparó contra el vehículo de Pablo, pero afortunadamente salió ileso del ataque.
Al brindar datos de los delincuentes, el hombre asaltado detalló que todos ellos tenían guantes de látex en sus manos, los que suelen utilizarse en la medicina, seguramente con el objetivo de no dejar huellas mientras cometían el asalto.
El hecho no fue aislado. Pablo recordó que hace apenas un mes y medio, otro grupo de delincuentes los había atacado. “Eran seis, estaban armados y nos quisieron atacar. Nos salvamos porque tenemos los vidrios blindados”, explicó, dejando en claro que la inseguridad en la zona es una constante.
A pesar de los reiterados episodios de violencia, el vecino se muestra firme en su decisión de seguir viviendo en su país. “Tuve la oportunidad de irme afuera y decidí quedarme. Quiero vivir en mi país. Lo único que pido es seguridad”, manifestó entre reclamos a las autoridades municipales y provinciales.
El caso está siendo investigado por la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N°1 de Morón, a cargo del fiscal Guillermo Rodríguez Rey, que está trabajando en la identificación de los delincuentes.