Fue el propio Antonio Benítez quien pidió, por intermedio de su abogado, ampliar la declaración indagatoria ante la juez Federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, que investiga la desaparición de Loan Danilo Peña. La audiencia se hará este miércoles desde la 9 bajo la modalidad virtual, ya que el imputado por la sustracción y el ocultamiento del menor está preso en un penal federal de la provincia de Salta.
Benítez es uno de los siete detenidos por la desaparición de Loan, ocurrida el 13 de junio pasado en el paraje Agarrobal de Corrientes. Es una pieza clave en el caso, ya que él es una de las últimas personas que vio al niño de 5 años esa tarde.
Incluso, Benítez fue quien decidió ese 13 de junio ir al naranjal a buscar frutas tras el almuerzo en la casa de su suegra, la abuela Catalina: lo acompañaron otros dos adultos que también están presos, Mónica Millapi y Daniel ‘Fierrito’ Ramírez, y seis niños, uno de ellos su sobrino quien se esfumó en ese lugar y hace 83 días que no hay un rastro sobre su paradero.
Durante la ampliación de la indagatoria, Benítez será asistido por su abogado Ricardo Osuna, mismo defensor del matrimonio Sena en la causa por el femicidio de Cecilia Strzyzowski en Chaco.
En su primera exposición ante la jueza Pozzer Penzo, Benítez intentó desligarse de lo que sucedió con Loan. “Ese día llevé a mi señora a cocinar el guiso”, comenzó diciendo en su declaración y luego agregó: “Creo que lo llevaron”. Pero no indicó quién o dónde está.
Sobre aquel 13 de junio, relató: “Llega Ramírez con la señora y todos los chicos, en eso que estábamos suena el teléfono de Ramírez y él se aleja, habrá hablado unos 15 minutos, cortó y le dije: ‘Vamos’. Seguimos camino, íbamos hablando, cuando llegamos a 150, 200 metros. Y ahí nos damos vuelta y dije: ‘Falta mi sobrino Loan’. Saco mi teléfono, le llamo a mi señora y le pregunté si estaba Loan ahí, y respondió que no”.
Así, según manifestó, Benítez entró a campos de la zona y le preguntó a vecinos, sin encontrar al chico. Al caer la noche, dijo que buscó una linterna. Habló de un pozo que interesó, supuestamente, al comisario Walter Maciel, imputado también por la desaparición del niño.
En un momento de su testimonio, Benítez aseguró haber sufrido apremios policiales: “Después estuve en la casa de mi suegra, me llevan hasta la escuela unos policías y me piden el teléfono. Les dije que estaba sin batería... Después, me esposaron, me pegaron, me dijeron que tenían el modo de hacer hablar”.
Además, negó tener algún vínculo con los detenidos, el capital de navío (RE) Carlos Pérez y la ex empleada municipal María Victoria Caillava, a pesar de que sus hijas y su mujer tenían agendada Caillava como “tía Victoria”.
“En la comida fue la primera vez que los vi. No suelo ir a la casa de ellos, mi señora es la que va”, dijo en referencia a Laudelina Peña, también detenida por la desaparición de su sobrino y que fue, para la Justicia, quien plantó el botín para desviar la investigación.
El ex policía Francisco Amado Méndez, vinculado a Maciel, fue liberado tras su detención el mes pasado, pero sigue siendo investigado.
Por todo esto mismo, la expectativa está puesta en lo que pueda llegar a declarar Benítez en su ampliación de indagatoria.