Simbología nazi, armas y réplicas de granadas: así fue el macabro hallazgo que tuvo lugar este jueves en un edificio de Rosario. Ocurrió durante la tarde, cuando la Policía ingresó a un departamento donde yacía un hombre de 60 años sin vida.
El caso conmocionó a los vecinos del edificio de nueve pisos, ubicado sobre Maipú al 800. Todo comenzó cuando los allegados se sorprendieron al no ver al hombre que vivía en el mismo domicilio. Ante esta situación, una amiga tomó conocimiento y decidió dirigirse al departamento. Sin embargo, no logró ingresar: la llave estaba colocada del lado de adentro. Por eso, debieron contactar a un cerrajero para que ayudara a abrir la puerta de acceso al lugar, de acuerdo a la información publicada por Rosario 3.
“Hoy me avisaron y como tenía las llaves vine, pero no pude abrir poque estaba trabado del lado de adentro, así que llame a la Policía y a un cerrajero”, explicó la mujer, según dio a conocer Rosario Nuestro.
Así, pudieron entrar pero se encontraron con una escena de terror. El hombre yacía muerto al lado de botellas de alcohol y una caja de pastillas.
Posteriormente, la Policía arribó a la escena y todo se tornó más complejo. En la vivienda, el personal policial encontró una ametralladora, una pistola, tres granadas, colgantes y un brazalete que contaban con simbología nazi, tal como precisó el medio local Rosario 3.
Ante el sorprendente hallazgo, los efectivos debieron aplicar el protocolo correspondiente, cortar la calle y evacuar a todos los vecinos del edificio.
Luego, se realizaron las pericias en el lugar y la Policía secuestró los elementos encontrados. Fue así como el personal pudo determinar que las granadas eran “réplicas de muy buena calidad” y desactivar las armas, según informó el portal de noticias citado
Por su parte, la amiga del hombre que fue hallado sin vida, comentó en diálogo con Telenoche Rosario: “Se excedió con las pastillas. A veces no estamos bien y pasan esas cosas”.
Insólito episodio en Córdoba: un delincuente con tres armas le disparó a la Policía y su pareja intentó liberarlo
Después de que los vecinos de Córdoba alertaran a la Policía sobre la presencia de un hombre armado, los agentes intentaron detenerlo y se desató un insólito episodio. El sospechoso, que tenía antecedentes penales, intentó disparar a los efectivos. Y luego, mientras era trasladado a la comisaría, su pareja trató de abrir el patrullero para liberarlo. También terminó esposada.
Fuentes policiales consultadas por Infobae confirmaron que el hecho se registró en Ramón Platero al 5300, en el barrio Parque República de la capital provincial. Minutos antes de las 13.30, un llamado telefónico particular alertó por la presencia de un hombre con armas de fuego en su poder.
Al arribar el personal policial, el sospechoso intentó dispararles pero la pistola no llegó a percutar. En respuesta, un cabo efectuó dos disparos de su escopeta Maverick con cartuchos de baja letalidad y lo detuvo. Posteriormente, le secuestraron una pistola Bersa Thunder calibre 9mm con 13 balas en su interior, un revólver calibre .38 con el cargador completo, un revólver calibre .32 descargado, una campera tipo chaleco inflable de color negro y una funda de chaleco táctico tipo militar de color beige.
El sospechoso, identificado como S.E.L., de 27 años, resultó herido y fue trasladado en ambulancia al Hospital Eva Perón. Una vez allí, la médica de turno constató que tenía una herida leve en la región dorsal.
Insólitamente, antes de que el tirador fuera derivado al centro de salud, una mujer identificada como L.M.M., de 26 años, intentó entorpecer el traslado al abrir las puertas del móvil policial para liberar al detenido. Así, la mujer, que sería pareja del acusado, terminó también detenida.