Al cierre de esta nota, seis efectivos de la Policía Bonaerense vigilan hoy en el hospital Balestrini a Facundo Leonel Saavedra, alias “Masita”, un joven picante de Ciudad Evita, acusado de ser un ladrón de autos de alta gama, internado luego de que sus enemigos le tiraran con una ametralladora. La intensidad de la custodia tiene un motivo obvio: los policías que le siguieron el rastro hasta encontrarlo herido en una cama de hospital público temen que su banda venga a rescatarlo.
El 22 de diciembre pasado, Saavedra, de 26 años, fue parte de un asalto a un subcomisario de la fuerza provincial, un intento de robo que terminó con el policía herido a tiros, baleado en la pierna derecha frente a su mujer. En ese golpe también, sospecha la Justicia y la DDI de La Matanza, habría estado presente Fernando Ezequiel Galarza, alias “Dólar”, la mano derecha de Nicolás Guimil, alias “Chaki Chan”, el narco que intentó en 2023 copar a tiros el barrio Las Antenas de Lomas del Mirador, con una fiscal antidrogas matancera, María Casal Gatto, procesada el mes pasado por supuestamente protegerlo.
Facundo Leonel, suponen investigadores, era parte de la banda de “Chaki”. Al caer Galarza en marzo, Saavedra habría tomado el mando de la organización, diezmada por los arrestos y por el encierro de su jefe máximo en el penal de Marcos Paz.
Sin embargo, “Masita” ya tenía enemigos, bandas rivales que le disputaban el territorio. En paralelo, la DDI de La Matanza comenzaba a seguir el rastro de la banda que atacó al subcomisario, con una causa a cargo de la fiscal Andrea Palin y el juez de Garantías Norberto Occhipinti.
Así, se realizaron una serie de allanamientos en enero último, con dos sospechosos que fueron arrestados. “Dólar” cayó el 8 de marzo. Hubo, al menos cuatro hampones en el ataque al subcomisario, una muestra de la pérdida de poder de la banda de Guimil, obligada a dedicarse a otros delitos.
Así, solo faltaba “Masita” mismo, con un pedido de captura nacional e internacional en su contra.
El video que ilustra esta nota explica por qué Saavedra terminó en una cama de hospital. El fin de semana último, un conflicto armado estalló en el barrio José Ingenieros de Ciudad Evita, el crac crac crac de las ametralladoras entre los monoblocks, con un auto que terminó en llamas, con vecinos desde los balcones que filmaban el espectáculo de la decadencia, rehenes con teléfonos.
Así, “Masita” fue herido. La DDI de La Matanza lo encontró en el hospital Balestrini: había sido internado allí con un nombre falso. Se hacía llamar “Yair Villarreal”. Así, le incautaron su teléfono, que podrá ser peritado, tal vez para llegar a una nueva pista contra “Chaki Chan”, su máximo jefe.