Dos hombres fueron arrestados por el personal de la Policía Federal luego de que Trenes Argentinos denunciara el robo de material ferroviario. El incidente ocurrió durante la noche del viernes, por lo que el servicio no sufrió interrupciones al poder reconectarse el tramo afectado durante la madrugada.
El hecho se conoció este sábado luego de que el Ministerio de Seguridad informara sobre la detención de dos masculinos que fueron atrapados en las cercanías de la estación de trenes de la localidad de Beccar. Los sospechosos fueron reconocidos como los sujetos que habían robado el cableado de una caja de señal que correspondía a la Línea Mitre.
Luego de que los efectivos los detuvieran, se descubrió que cargaban consigo diferentes elementos cortantes y un cable cortado. De esta manera, los ladrones fueron puestos a disposición de la Justicia, a la vez que se confirmó que la causa será intervenida por la jueza Sandra Arroyo Salgado, a cargo del Juzgado Federal N° 1 de San Isidro.
En paralelo, el personal de Trenes Argentinos comunicó que los cables que habían sido robados ya fueron reemplazados y que el recorrido funciona con normalidad. Asimismo, destacaron que la detención y la recuperación del sistema ferroviario fue posible gracias al trabajo coordinado que se realizó entre el Ministerio de Seguridad y la Secretaría de Transporte que cuentan con un equipo destinado para resolver las problemáticas que pudieran presentarse en el servicio.
Desde mayo de este año, el Gobierno puso en vigencia la Emergencia Ferroviaria luego de que detectaran varias irregularidades y problemas de funcionamiento. Por medio de un informe realizado por la Comisión Nacional Regularizadora del Transporte (CNRT) sobre las condiciones en las que se encontraba el servicio el año pasado, las autoridades destacaron que el robo de cables y deficiencias en la infraestructura eran las problemáticas a combatir.
“Al mismo tiempo, se ha registrado una ineficaz gestión y planificación de las contrataciones destinadas al mantenimiento del material rodante, lo cual ha conllevado, en la práctica, una sensible disminución de formaciones en servicio y por consiguiente una disminución en las frecuencias”, explicaron desde el Gobierno a través de la publicación del Decreto 525/2024 en el Boletín Oficial. Por esto, se decidió que la medida se mantendrá en vigencia por el plazo de 24 meses, es decir hasta el 2026.
De esta forma, el presidente Javier Milei dispuso la asignación de un presupuesto general adicional de $1.293.780.000.000 (un billón doscientos noventa y tres mil setecientos ochenta millones de pesos) que deberán ser destinados para fortalecer el funcionamiento del sistema ferroviario. Además, se utilizarán los $350.000.000.000 (trescientos cincuenta mil millones de pesos) para las obras y contrataciones necesarias para mejorar el servicio.
La medida fue aprobada luego de que se produjera un choque de trenes de la Línea San Martín en Palermo el pasado 10 de mayo. La colisión fue provocada por una formación que trasladaba a unos 100 pasajeros contra un tren vacío que estaba detenido sobre el puente ferroviario que cruza la avenida Figueroa Alcorta.
Desde la empresa explicaron que el siniestro fue consecuencia de un daño en el sistema de señalización, el cual no permitió detectar la presencia de la unidad que era utilizada para transportar cargas. El mal funcionamiento también estuvo relacionado con el robo de cables en el tramo que une al Cabín Ocampo con la estación de Palermo, según indicaron en el informe preliminar publicado por la Junta de Seguridad en el Transporte (JST).
El robo de los recursos generó un “bloqueo absoluto”, lo cual impediría que más de un tren pueda circular por la misma sección, sin importar que estos tuvieran sentidos opuestos. “Todo tren proveniente de Retiro debe detenerse en el Cabín Ocampo para que personal de puesto de señales realice el pedido de vía libre a estación Palermo, quien debe concedérselo si la vía se encuentra libre”, detallaron sobre el protocolo a seguir por el personal ferroviario.
No obstante, las pericias determinaron que lo que ocurrió ese día fue producto de “una serie de detenciones que ocurrieron por orden de la computadora a bordo”. El desperfecto afectó al tren de carga y aún no se esclarecieron los motivos que generaron el fallo electrónico. La falla tampoco había sido detectada, por lo que los operadores del tren de pasajeros recibió la luz verde para avanzar sobre el carril y fue así que se originó el choque.
El siniestro dejó un saldo de 90 personas heridas, entre pasajeros y personal ferroviario. Del total de los lesionados, 55 debieron ser trasladados por el SAME a diferentes hospitales. Asimismo, se notificaron daños importantes en ambas formaciones y en el puente, tales como deformaciones en la estructura y en la mampostería de su ingreso.