Bastián Nehemías Escalante Montoya tenía apenas 10 años cuando perdió la vida. El nene recibió dos disparos en medio de un enfrentamiento entre un policía de civil de la Bonaerense y un grupo de motochorros que intentó robarle en Wilde, el 10 de julio pasado.
El caso está a cargo del fiscal Ignacio Colazo, de la UFI Nº2 del Fuero de Responsabilidad Penal juvenil del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, quien trata de reconstruir lo ocurrido.
En ese sentido, en las últimas horas salió a la luz un nuevo video de la secuencia, que quedó registrada por las cámaras instaladas de la zona. Las imágenes muestran el momento en el que los ladrones intentaron arremeter contra el efectivo, quien rápidamente sacó su arma reglamentaria. Ante ello, los delincuentes se dieron a la fuga y en la escena se observa al oficial apuntándoles.
El policía, Juan Alberto García Tonzo, fue imputado homicidio cometido con arma de fuego en exceso de la legítima defensa. El abogado Matías Morla, quien representa a la familia de Bastián, cuestionó el accionar que tuvo en el hecho: “En las imágenes se puede apreciar que los ladrones se fueron corriendo y el policía, dominado por la ira, les seguía disparando por la espalda y solo frenó cuando su cargador se agotó”, dijo.
La pericia balística sobre la pistola del agente -una Bersa calibre .9- determinó que “habría sido disparada con anterioridad al estudio realizado” y que “las vainas servidas individualizadas como 1, 2, 3, 4, 5, 6, 9 y 15 han sido percutidas”.
A partir de ese informe preliminar y del nuevo video que se conoció recientemente, Morla adelantó que pedirá un cambio de carátula: para el letrado no existió un exceso en la legítima defensa.
El caso
El miércoles 10 de julio, cerca de las 20, Bastián salió del club de fútbol Barrio de La Carne, en la intersección de Caxaraville y Rondeau. El menor se desplazaba en bicicleta y su madre lo acompañaba caminando. Fue en ese momento cuando comenzaron los disparos y se convirtió en la víctima fatal de la secuencia.
Tras resultar gravemente herido, Bastián fue trasladado de manera urgente al Hospital Presidente Perón. Su estado de salud era muy delicado. Según dio a conocer el informe de la autopsia, la bala ingresó por la cervical derecha y salió por su hombro izquierdo. Esto le causó un shock hipovolémico por hemorragia aguda.
Bastián sufrió dos paros cardiorrespiratorios: durante el primero, los médicos lograron reanimarlo. Pero, posteriormente, mientras estaba siendo intervenido nuevamente, tuvo un segundo paro y su cuerpo no pudo resistirlo.
Días después del hecho, su madre, Johana, pidió justicia y reclamó: “Queremos que vayan presos todos porque son responsables”.
“El policía ve que los chorros van al lado nuestro, ¿por qué sigue disparando de esa manera? ¿Por qué no entregó la moto? ¿Era más importante una moto que la vida de una víctima?”, se preguntó la mujer, dolida, en diálogo con TN.
Además, recordó cómo fue aquel momento en el que su hijo se convirtió en la víctima fatal del hecho. “Apenas vi que el policía sacó el arma, inmediatamente, le dije a Bastián que nos volvamos porque estaban robando. Y apenas giramos, empezamos a escuchar los disparos”, narró la mujer.
“Es muy difícil porque yo a él lo cuidaba tanto... Lo cuidaba un montón como para que me lo arrebaten de esa manera”, lamentó Johana. A su vez, contó cómo viven desde aquel jueves en el que perdió a su hijo. En este sentido, relató: “Mi otra hija va al club y nos cambió todo por completo: cómo la llevo y cómo salgo, todo por el miedo que nos quedó”.