Esta semana, un hombre de 35 años oriundo de Perú fue detenido en el barrio porteño de Palermo por comercializar cocaína a bordo de un taxi, en el que llevaba a su hija de 2 años.
Según indicaron fuentes policiales a Infobae, efectivos de la División Investigaciones Antidrogas Zona de la fuerza porteña advirtieron durante la madrugada que el taxista en cuestión -ubicado en la intersección de la avenida Córdoba y Humboldt- realizaba un típico pasamanos con un peatón a través de la ventanilla de su Fiat Siena.
Tras interceptar el vehículo, notaron que el conductor, de nacionalidad peruana, estaba acompañado por la niña de 2 años. Así, le pidieron descender del auto y lo registraron. Le encontraron 37 envoltorios de cocaína ocultos en la botonera del levanta vidrios delantero, dos celulares y 28 mil pesos en efectivo.
La Unidad Flagrancia Norte, que interviene en la causa, dispuso el secuestro de los elementos y del Fiat Siena. Así, el chofer, identificado como E.D.D, registrado en los rubros de transporte de la AFIP, que trabajó en el pasado para varias empresas del rubro según registros previsionales, terminó detenido.
La niña fue resguardada por miembros del Consejo de Niños, Niñas y Adolescentes del Gobierno de la Ciudad hasta que se presentó la madre para retirarla.
Otro caso de venta de drogas con chicos
Dos semanas atrás, la Policía de la Ciudad llevó adelante una redada contra una banda familiar que también utilizaba a un bebé como fachada para vender droga en la plazoleta Lola Mora, en Constitución. Tras una investigación de la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Delitos vinculados a Estupefacientes de la fiscal Cecilia Amil Martín, fueron imputadas cinco personas, quienes admitieron su culpa en un juicio abreviado.
Tras un reporte policial que advirtió la situación, la UFEIDE -a cargo de la fiscal Cecilia Amil Martín- ordenó tareas en la zona. Así, se vio que frecuentemente se acercaban personas a un banco de la plaza, en donde esperaba un grupo de hombres y mujeres.
Tras hacer un pasamanos, se alejaban.
De esta forma, la fiscal solicitó una orden de allanamiento a los domicilios de los implicados, así como requisas personales a personas investigadas por el delito. Fueron secuestrados 19 envoltorios de cocaína, más de 1,3 kilos de marihuana, balanzas de precisión, teléfonos y dinero en efectivo.
Tres hombres y dos mujeres que formaban parte de la banda fueron imputados. En el juicio abreviado, se solicitó la condena de 3 años y 6 meses de prisión efectiva para uno de los imputados y de 2 años efectivos para una de las mujeres.
Otros dos implicados recibieron un año en suspenso por “tenencia simple de estupefacientes”, y el quinto integrante enfrenta medidas cautelares restrictivas.