El Ministerio de Seguridad de la Nación ofrece una recompensa de cuatro millones de pesos para quien aporte información que permita detener a los involucrados en el asesinato de Carlos Loira, un prefecto que perdió la vida de un disparo en el abdomen cuando se defendía de un intento de robo en Villa Fiorito el pasado mes de marzo.
El hecho ocurrió el día martes 25/3 a las 21 horas aproximadamente en las inmediaciones de la intersección de la calle Mario Bravo y Ginebra de la mencionada localidad perteneciente al partido de Lomas de Zamora, al sur del conurbano bonaerense.
Esa noche, Loira arribó a bordo de su vehículo, una camioneta Renault Duster, acompañado por un hombre de apellido Ibáñez; se dirigían con el objetivo de entregar mercadería del rubro verdulería, actividad comercial de la esposa del prefecto. Loira descendió del vehículo y se acercó a la puerta del domicilio de la clienta; en ese momento fue sorprendido por un auto Chevrolet Corsa de color gris, del cual descendieron al menos tres individuos con intenciones de robarle.
Uno de los delincuentes forcejeó con el agente, el cual intentó extraer su arma reglamentaria. En este marco se produjo un tiroteo en el cual Loria fue herido de muerte.
A las horas de cometido el crimen, la Policía arrestó en La Cava a uno de los sospechosos, apodado “Pepo”, de 26 años. Ese día, Patricia Bullrich se expresó en sus redes sociales: “Acabo de hablar con la mujer del prefecto Rafael Carlos Loira, brutalmente asesinado ayer por 3 criminales en Villa Fiorito. Le di el pésame en nombre de nuestro Gobierno y le dije que no vamos a abandonarla, ni a ella ni a su familia, y que ya la Policía de la provincia de Buenos Aires detuvo a uno, en Villa Fiorito, de nombre Lucas “Pepo” Pongonza. Ahora, junto a la Policía provincial, vamos a ir por todos los responsables. La van a pagar”.
Semanas más tarde, fue aprehendido en el mismo barrio “Pulguita” (32) y en Ingeniero Budge cayó el propietario vehículo en el que se movilizaron los homicidas en el momento del hecho. Se trata de otro sujeto, también de 32 años y conocido como “Palermito”.
Pese a concretar las tres detenciones, este martes el Ministerio de Seguridad sorprendió al anunciar la recompensa y reconocer que “al día de la fecha no se pudo individualizar a los responsables del hecho ocurrido”.
La oferta de la cartera a cargo de Bullrich se hizo efectiva a través de la Resolución 628/2024, publicada esta madrugada en el Boletín Oficial. Los $4.000.000 están destinados a “aquellas personas que, sin haber intervenido en los hechos delictuales, brinden datos útiles que permitan lograr la detención del autor o los autores del homicidio de Rafael Carlos Loira”.
“Quienes cuenten con información podrán comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Recompensas, llamando a la línea gratuita 134″, informó el Gobierno. “El pago de la recompensa será realizado en este Ministerio o en el lugar que designe la representante de esta Cartera de Estado, previo informe del representante de la autoridad interviniente sobre el mérito de la información brindada, preservando la identidad del aportante”, se aclaró.
Tenía dos hijos y repartía verdura para llegar a fin de mes: quién era el prefecto asesinado en Lomas de Zamora
El día del crimen, Carlos Loira, de 49 años se había pedido el día en el trabajo para hacer una celebración especial: los 28 años de casados con Sonia, cuyo aniversario había sido dos días antes. Pero el festejo se transformó en luto tras ser asesinado durante el intento de robo.
Padre de dos hijos, el prefecto Loira se definía como un amante de su trabajo. “Era un policía de ley”, lo describió su mujer en diálogo con la prensa. Lo hizo mientras relataba cómo sucedió el crimen y recordaba que, minutos antes de que este sucediera, le había llegado a dar el último beso.
En la Prefectura el hombre tenía su fuente de trabajo principal. Pero no era el único: en el último tiempo, había comenzado con un emprendimiento familiar en el que repartía frutas y verduras para llegar a fin de mes.
“Venta al por menor de frutas, legumbres y hortalizas frescas”, era la actividad secundaria que tenía registrada el agente, en la cual se turnaba con su esposa para realizar los pedidos.
“Me dijo ‘bajate de la camioneta, voy yo’. Él venía de trabajar y antes de salir me dijo: ‘¿no me vas a dar un beso?’. En el alboroto le doy un beso, se va y a los cinco minutos me llamaron”, manifestó la mujer.
“Me llamó una mujer desesperada, me dice ‘vení por favor, que le quisieron robar a tu esposo, está tirado en la calle. Vení, vení’. Y bueno lo llamé a mi hermano que vive en frente del negocio y salimos volando. Ya cuando fuimos lo vimos muy malherido, no venía la ambulancia y decidimos levantarlo porque yo ya no quería esperar más. Le hablaba, le di respiración, lo levantamos como pudimos entre todos. Lo puse en mi regazo y nos fuimos al UPA”, describió sobre el episodio.
La víctima también era papá de dos hijos adolescentes. La esposa de la víctima comentó en una entrevista radial que el menor tiene 15 años: “Me dijo que no lo disfrutó a su papá. Está destrozado, no tenemos consuelo ni sabemos cómo vamos a seguir”.