Un policía del Comando de Patrullas de Tres de Febrero mató a un motochorro que intentó robarle en Morón, provincia de Buenos Aires. El cuerpo del ladrón fue abandonado a dos cuadras del hecho por su cómplice, quien aún continúa prófugo.
Todo sucedió cerca de las 8 de la mañana del sábado en Morón sur, cuando el oficial, cuya identidad no trascendió, se dirigía a su trabajo a bordo de su moto Honda. De repente, dos motochorros, que circulaban en otra motocicleta, lo interceptaron con claras intenciones de robo. Querían su rodado.
De acuerdo con la información a la que pudo acceder el medio local Primer Plano Online, ante este escenario, el hombre se identificó como policía y abrió fuego contra los ladrones: disparó en al menos dos oportunidades. Uno de esos disparos impactó contra uno de los motochorros.
Ambos se dieron a la fuga y, apenas dos cuadras después —exactamente en la intersección de las calles Santa María y Avellaneda—, el cuerpo del motochorro fue abandonado por su cómplice, quien a su vez dejó la moto en la que se movilizaban y escapó a pie.
En simultáneo, el oficial dio aviso a las autoridades y solicitó una ambulancia para poder trasladar al ladrón. Sin embargo, al llegar al lugar, el equipo médico constató que estaba muerto.
Frente a esto, se inició una causa por el delito de robo agravado en grado de tentativa seguido de homicidio, que quedó en manos de la fiscal Adriana Suárez Corripio, de la Fiscalía N°8 de Morón. En línea con sus primeras averiguaciones, pudieron identificar al delincuente fallecido como Franco Ezequiel Cabrera, de 21 años.
De igual forma, no avanzó con ninguna imputación contra el oficial. Al tratarse de un oficial de la Policía, Suárez Corripio solicitó que las pericias correspondientes sean realizadas por la Gendarmería Nacional.
A finales de junio, hace tan solo dos semanas, un hecho similar ocurrió en Morón. En esa oportunidad, el oficial pertenecía a la Policía de la Ciudad e intentó defender a una pareja de un robo.
La secuencia tuvo lugar en la intersección de las calles Ramón Lista y Manuel Rico, ubicadas en la localidad de Villa Sarmiento, cuando las víctimas fueron abordadas por dos delincuentes. El efectivo observó la secuencia desde la esquina, donde esperaba a su novia
Luego de que se diera cuenta de las intenciones de los ladrones, el policía dio la voz de alto y se identificó como un oficial, con el objetivo de que los ladrones no cometieran el crimen. Sin embargo, al percatarse de la presencia de un miembro de las fuerzas de seguridad, los delincuentes comenzaron a disparar en contra del agente, quien respondió con su arma reglamentaria.
El efectivo consiguió poner fin a la balacera después de herir a los ladrones. En consecuencia, ambos cayeron de la moto y decidieron darse a la fuga a pie.
El oficial advirtió de lo sucedido a las autoridades y, minutos después, los responsables fueron ingresados al Hospital Posadas. Según confirmó el personal médico, uno de ellos, identificado como Federico Jesús Miño, de 23 años, murió esa noche como consecuencia del balazo que se alojó en su cadera.
En el caso del segundo involucrado en el intento de robo, las autoridades confirmaron que se trataba de un joven de 19 años llamado Joaquín Nicolás Bertucci. El delincuente tenía una herida en la pierna izquierda y otra en la zona del tórax, por lo que tuvo que ser operado.
Por otro lado, los investigadores solicitaron el arresto de otros sospechosos luego de que se confirmara que los delincuentes habían llegado al hospital acompañados de cuatro amigos. Todo el grupo fue privado de la libertad, aunque las autoridades plantearon la posibilidad de que a cada uno de ellos les correspondiera distintas responsabilidades respecto del hecho.