Agustín De la Encina, un bróker de seguros, fue identificado este miércoles por la Fiscalía Federal de Rosario como uno de los responsables de un cargamento de cocaína valuado en 250.000 dólares, que tenía como destino Rosario y que fue incautado por la Policía Federal hace 10 días en San Pedro.
El joven, quien se encuentra detenido en la cárcel de Coronda en la provincia de Santa Fe desde hace casi tres años por una causa de drogas de menor envergadura. Allí, vio su perfil criminal crecer exponencialmente desde su encarcelamiento y a lo que antes, se dedicaba a la asesoría de seguros, ahora está involucrado en actividades mucho más peligrosas.
Y en el marco del operativo Jackpot de la División Antidrogas de la Policía Federal, su celda fue allanada por aquellos días. Este operativo debe su nombre al número 777, que apareció en los envoltorios y sellos de los 30 kilos de droga incautados el 1º de julio en territorio bonaerense.
Es de destacar que según un diccionario de jerga de la DEA, este número 777 se refiere a la cocaína, de manera similar a como el número 420 se asocia con la marihuana y este hallazgo ha sido clave para la investigación en curso.
Cabe recordar que a mediados del año 2023, De la Encina estaba procesado por una causa menor de tráfico de drogas y en aquella investigación, fue detenido a finales de 2021 con 700 gramos de cocaína en un departamento ubicado en la intersección de Pellegrini y Laprida, frente a la Plaza López en la ciudad de Rosario.
Según escuchas judiciales, “pagaba para obtener privilegios dentro del penal”, donde actualmente estudia Derecho, una situación evidencia la corrupción y los problemas internos en las cárceles.
Sin embargo, y según informó el portal Rosario3, en octubre de 2023, la situación de De la Encina se complicó aún más cuando una investigación del fiscal de Homicidios de Rosario, Gastón Ávila, lo señaló como instigador de un intento de asesinato en marzo de ese año.
La víctima, Maia, recibió cuatro disparos y sobrevivió, pero su testimonio y el de otros testigos implicaron a De la Encina en una trama de venta de drogas que involucra a actores de la clase media acomodada.
De la Encina fue acusado de haber contratado a dos sicarios desde prisión para que mataran a Maia y el pasado 6 de octubre, la jueza Verónica Lamas González dictó prisión preventiva sin plazo, complicando aún más su situación legal y frustrando cualquier posibilidad de libertad en el corto plazo.
Recientemente, su nombre volvió a aparecer en un expediente federal relacionado con la cocaína incautada en San Pedro. La investigación se había iniciado con el secuestro de 10 kilos de cocaína en diciembre, transportada en un taxi por dos personas de bajos recursos que solo actuaban como transportistas. Este incidente puso en marcha una serie de investigaciones que revelaron una red más amplia de tráfico de drogas.
Las autoridades vinculan a De la Encina con Ayelén Alarcón, presunta encargada de sus negocios extramuros, y con los hermanos Misael y Fernando R., ambos empleados del sector del transporte. Los hermanos fueron detenidos con el cargamento de cocaína en un bar en San Pedro el 1º de julio y este caso destaca la complejidad y el alcance de las operaciones de narcotráfico en la región.
El incremento en la cantidad de droga manejada por De la Encina y su red, así como la violencia asociada, subraya la necesidad urgente de estrategias más efectivas para combatir el narcotráfico en Argentina. Las autoridades continúan investigando para desmantelar esta red y prevenir futuros incidentes similares.