“Estoy tirado en el piso de mi casa llorando con mi mamá”, fueron las primeras palabras de Luciano minutos después de haberse dado cuenta de que él y su madre habían sido víctimas de una gran estafa por MarketPlace. Les robaron todo: vaciaron sus cuentas de banco, les sacaron casi 3 millones de pesos y además les crearon una deuda millonaria cercana a los $10.000.000.
Todo comenzó a partir de la venta de unos muebles viejos. Eran unas sillas y una mesa que la mujer había publicado por 200 mil pesos con la idea de venderlos cuanto antes. Para su suerte -según pensó ella en ese momento-, rápidamente apareció un comprador, quien le ofreció hacerle una transferencia por la mitad del valor total y el resto abonárselo en efectivo al momento de la entrega.
La vendedora aceptó la propuesta un día sábado sin saber que, al hacerlo, estaba poniendo un pie en el engaño. Acto seguido, le pasó su CBU y su número de celular, por donde el estafador se comunicó con ella y la mantuvo envuelta en su mentira hasta el miércoles de esta semana, cuando concretaron su objetivo.
Quien se contactó por WhatsApp fue un tal Santiago, que dijo ser hijo del usuario que se había comunicado por Facebook. “Él le envía un comprobante falseado a mi mamá que decía que, en vez de transferir lo acordado, había mandado por error un millón 150 mil pesos. Dijo que estaba desesperado y que ya había hecho la denuncia al banco para que se la pudiera devolver”, dijo Luciano en diálogo con Infobae.
Entonces entró en escena otra persona más del grupo de los estafadores: Carlos, quien dijo ser del banco Macro y estar al tanto de lo sucedido. De acuerdo a sus indicaciones, para solucionar el conflicto de la transferencia, era necesario que la mujer simulara préstamos en su cuenta bancaria. Esto era, supuestamente, para chequear que no tuviera ningún límite diario de transferencia que imposibilitara la devolución de la plata equivocada cuando esta se acreditara. “Ella nunca dio la clave de nada. Y como siempre cumplió a nivel crediticio con su banco, tenía un tope de hasta 12 millones de pesos en su banco (el Francés) para generar préstamos”, contó su hijo a este medio.
Sin embargo, nada era una simulación: la víctima estaba constituyendo préstamos reales. “Después de este procedimiento (que duró hasta el miércoles) los estafadores le dijeron a mi mamá que el dinero todavía no había podido ser devuelto porque su cuenta estaba en revisión por el Banco Central. También le avisaron que, por este motivo, no iba a poder hacer movimientos hasta nuevo aviso. Ahí me llamó desesperada y me contó la situación”, continuó su relato Luciano, aún consternado por lo sucedido.
La mujer, que simplemente quería colaborar en la devolución de un dinero que le habrían enviado a ella por error, ahora también estaba desesperada por desbloquear su cuenta. Pero para solucionar los dos temas, los estafadores -que todavía se hacían pasar por bancarios- le dijeron que era necesario otro CBU de respaldo con el cual proceder.
Entonces cayó en la mentira el hijo de la mujer: “Yo solo quería ayudar a mi mamá y bajé la guardia. Ahí atendí a Carlos, ‘del banco Macro’. Me hizo todo el cuento de que la llamada la estaban grabando y me dijo que la cuenta de mi mamá estaba en revisión, por lo que necesitaban mi CBU”.
Según le dijeron, su cuenta iba a ser utilizada para reintegrar el dinero de los préstamos que le habían generado a su madre. Destacaron que era la única supuestamente autorizada para esta operación y que, para continuar, era requisito que estuviera completamente vacía.
Pero Luciano contaba con dinero en su caja de ahorro: “La hicieron vaciar. Primero me hicieron transferirme un millón 500 mil pesos a mi cuenta de Mercado Pago y después, en dos pagos, me hicieron transferir 750 mil pesos a una cuenta de una supuesta tesorera del banco. Ahí me sacan la mitad de mi plata”, relató.
Cuando los estafadores corroboraron que él tampoco tenía límite de movimiento, le pidieron una transferencia más: “Me dijeron que habían comprobado que la cuenta se podía utilizar para reestablecer la de mi mamá y me hacen hacer otro envío de 1.300.000 mil pesos al CBU de la tesorera. Ahí es donde me quedé en cero”. “Me dijeron que en dos o tres minutos iba a ver de nuevo mi dinero en la cuenta. Una mitad en el banco y la otra en Mercado Pago. Lógicamente, no hubo devolución alguna”, señaló.
Al cabo de unos instantes, Luciano se dio cuenta de lo que había sucedido y llamó a su mamá para contarle que habían sido estafados. Cuando se encontraron, y en una mezcla de frustración, bronca y angustia, los dos se tiraron a llorar. Se habían quedado sin sus ahorros y no sabían cómo proceder.
“A mí en total me sacaron 2 millones 800 mil pesos. A ella le generaron cuatro préstamos de 2 millones y medio de pesos cada uno, por lo que ahora tiene una deuda cercana a los 10 millones de pesos”, sintetizaron sobre el monto total que se llevaron los ladrones en la estafa.
Este miércoles, el día en el que terminó todo, ambos se dirigieron a realizar la denuncia penal en la Comisaría 1era de Olivos. Además, iniciaron el reclamo en los bancos Francés y Supervielle, donde tienen sus cuentas. En ambos casos se adjuntó la denuncia como prueba de lo que pasó.
“Nos dijeron que de acá a 10 días hábiles nos van a indicar cómo seguir y a partir de ahí empezará la lucha para intentar recuperar el dinero perdido. Ahí evaluaré los pasos a seguir, hacer una denuncia en defensa del consumidor, poner un abogado y demás. Ahora, hasta que no tenga la respuesta del banco no puedo hacer nada más”, concluyó Luciano, destacando la atención que recibió en las sucursales.