Cuatro delincuentes se fugaron de la comisaría octava de Bernal, partido de Quilmes. Hasta el momento, la Policía Bonaerense logró recapturar a dos de ellos, pero los restantes continúan prófugos.
La fuga sucedió durante la tarde del martes en la seccional ubicada en la calle Paraná al 466, en la zona de Barrio Parque. Por esto mismo, se puso en marcha un operativo de rastrillaje, que obligó a cerrar el tránsito en los alrededores.
De acuerdo con la información a la que pudo acceder el medio local El Sol Noticias, cerca de las 18 horas, el primer delincuente habría sido recapturado en las inmediaciones de la autopista. El segundo prófugo fue detenido durante la noche del martes en la zona de Guernica, tal como informó TN.
De igual forma, aún hay otros dos presos que son intensamente buscados por las autoridades. La causa quedó en manos del fiscal Jorge Saizar. No trascendió la identidad de los presos involucrados en la fuga.
En julio del año pasado, la comisaría ya había sufrido un intento de fuga. El hecho ocurrió el 9 de julio cerca de las 11.30 horas, cuando los cuatro hombres intentaron escaparse de su celda en la que estaban alojados.
Los reclusos aprovecharon cuando el oficial abría la puerta del calabozo para que pudieran ir al baño. De esta manera, atacaron a golpes al agente y lo redujeron. “Abrime la reja que nos vamos, te vamos a matar”, dijeron en esa oportunidad.
Otro policía se percató de la situación y alertó a sus compañeros, quienes intervinieron con escopetas y balas de goma para evitar la fuga. En consecuencia, uno de los reclusos resultó herido en el ojo y otro detenido sufrió una herida en su pierna.
La situación fue controlada al poco tiempo. De igual forma, la causa quedó en manos Unidad de Instrucción (UFI) 3 de Quilmes, a cargo de Conde Martin, quien caratuló la causa como “tentativa de evasión y lesión”.
Fuga en Lanús y un comisario detenido
En abril de este año, un comisario de Monte Chingolo fue detenido por la fuga de un preso de la comisaría sexta de Lanús.
De acuerdo con la información dada a conocer, el detenido, identificado como G.E.S., de 32 años, permaneció encerrado por pocas horas: había sido detenido este domingo por resistencia a la autoridad y lesiones agravadas por el vínculo, en una causa en la que interviene la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°8 de Lanús.
Según detallaron las fuentes, el imputado se encontraba en la última celda del calabozo, a la espera de ser trasladado a la Comisaría 1ª de Lanús. Luego de advertir que se había dado a la fuga, se encontraron dos candados violentados: el que aseguraba la celda y el de la puerta de ingreso.
Al tomar conocimiento de lo ocurrido, el fiscal Rodríguez convocó a la Dirección General de Asuntos Internos, que depende del Ministerio de Seguridad bonaerense, y dispuso la aprehensión del comisario L.D. y de la Oficial de Servicio E.M. por los delitos de desobediencia a la autoridad, incumplimientos de los deberes de funcionario público y favorecimiento a la evasión.
Las fuentes consultadas por este medio revelaron que la Comisaría 2º de Lanús se encontraba en pésimas condiciones y sus mecanismos de seguridad interna no eran los mejores. “Se comprobó que los barrotes eran de muy mala calidad y que los dos candados que rompieron estaban oxidados”, indicaron. De igual forma, revelaron que en el momento en que se escaparon los cinco presos había únicamente tres policías cuidándolos.
En ese sentido, explicaron que la Comisaría estaba habilitada para 12 presos en total: antes de la fuga había 27. Entre otros detalles acerca de las fallas en la seguridad de la seccional, las fuentes explicaron que parte del problema también se explica debido a que en Lanús había quedado pendiente la construcción de una Alcaidía que hubiese permitido aliviar la sobrepoblación de presos.