Peter y Cristina Horn, los padres de Julia, la turista alemana hallada sin vida el lunes en una quebrada del cerro Tres Marías de San Juan recibieron el permiso de la Justicia de la provincia para recuperar el cuerpo de la joven tras la autopsia. La pareja había llegado al país tras la desaparición de su hija.
Según indicaron fuentes judiciales a Infobae, la medida fue ordenada por los fiscales Iván Grassi y Michel Torena, luego de que los exámenes forenses descartaron cualquier indicio de un asesinato.
La madre regresó a Alemania ayer, mientras Peter Horn continuaba con los trámites para la repatriación del cuerpo en un consulado local. De acuerdo con lo que expresó la familia, su idea es cremar el cuerpo de la joven, cuyos restos fueron hallados en una quebrada del cerro Tres Marías, tras llevar cuatro días desaparecida. El cuerpo de la turista fue hallado por una fuerza de más de 50 policías provinciales y gendarmes, quienes retiraron los restos de una quebrada de difícil acceso.
Ayer por la mañana, los forenses de la Morgue Judicial del departamento Rivadavia de San Juan realizaron la autopsia al cuerpo de Julia. Poco después del mediodía, este medio accedió a los resultados preliminares del estudio.
Los forenses determinaron que la joven alemana murió de “forma violenta”. Sufrió un daño al tronco cerebral producto de una subluxación le quitó la vida. No se hallaron signos en el cuerpo compatibles con un acto criminal.
Según el análisis de los médicos legistas que vieron el cuerpo en un primer momento, no se encontraron lesiones compatibles con un homicidio claro. Se notaron de inmediato múltiples fracturas en la pelvis, así como varios hematomas en el rostro de la víctima.
Se continuará con más estudios en la causa para resolver finalmente el proceso de la muerte de Julia. Se realizaron varias radiografías al cuerpo, así como la extracción de sangre y orina para estudios toxicológicos, junto a hisopados nasales. Finalmente, se retiró el humor vítreo de los ojos, que permitirá establecer la data del fallecimiento y si sufrió un tiempo de agonía.
Por las evidencias disponibles, los fiscales creen que murió de inmediato, tras una caída de, al menos, 50 metros.
Una pista que será investigada es la del celular de la víctima, que fue recuperado junto con los restos. Lo hallaron en el bolsillo del pantalón de Julia, notablemente roto. Su última señal fue emitida el jueves a las 15:53, día en el que la joven alemana se dirigió al Tres Marías.
Sin embargo, los fiscales Grassi y Torena ordenaron una extracción forense de datos al aparato, que será realizada por personal de Apoyo Tecnológico dependiente de la Policía de San Juan. Así, podrán determinar si Julia intentó pedir auxilio, o cuáles fueron las conversaciones previas a su fallecimiento.
Julia había llegado a San Juan como pasante de intercambio a la ONG de voluntariado Youth For Understanding (YFU) el 14 de mayo. Tenía 19 años.