Se llama Fernando Gastón Barbatelli, tiene 41 años y fue detenido este miércoles en la Ciudad de Buenos Aires, acusado de ser el cerebro que estafó con criptomonedas por más de 1,25 millones de dólares a un ciudadano chileno y otro mexicano por medio de una suplantación de identidad. Hay otros tres detenidos, cómplices del ideólogo del ardid, y se secuestró 656.000 dólares en criptos.
“Es un conocido estafador, básicamente se dedica a eso”, le cuenta a Infobae uno de los investigadores que participó de los operativos que la Policía de la Ciudad realizó este miércoles por orden del fiscal Alejando Musso, de la Fiscalía Especializada en Investigación de Ciberdelitos de San Isidro.
¿Qué se le ocurrió a Barbatelli? Básicamente, suplantó la identidad de otra persona para convencer al ciudadano chileno de invertir. Las fuentes del caso describieron la maniobra así: “Se hizo pasar por un conocido suyo de Tierra del Fuego. Le envió toda documentación modificada con Photoshop, y hasta le falsificó billeteras para dar la imagen de que tenía las cripto y e invertía. Todo para generar confianza en esta persona, que terminó entregando las 20 cripto”.
Todo comenzó hace más de un año, cuando la víctima de nacionalidad chilena estaba en Argentina. “Le ofrecen de forma virtual hacer una inversión algo en el aire, de esas que no te dicen para qué son, pero la víctima tenía cripto”, detallaron las fuentes.
Precisamente, la víctima tenía cinco bitcoins y decidió invertirlas con esta persona sin saber que todo era trucho y le había tomado la identidad a otro inversor. Y describieron cómo siguió la estafa: “Lo que pasó es que le chuparon las cinco bitcoins. Entonces, después le dijeron que, para devolvérselas, tenía que seguir invirtiendo, para poder sacar el rédito”.
Y es ahí donde ingresa la víctima 2: un ciudadano mexicano que vive en Estados Unidos. “El chileno puso 15 bitcoins más de su colega y, en total, ya eran 20. El Bitcoin está $64.000, cada uno. Obviamente, todo desapareció”, resumieron la maniobra.
Ante esto, se hace la denuncia y los investigadores relataron que comenzaron a hacer un rastreo criptográfico con herramientas forenses de esa transacciones y, luego de algunos saltos de billeteras que no se pudieron identificar, llegaron a la de una ciudadana china y la empezaron a estudiar.
“Estaba casada con otro chino que había pasado por sus billeteras en dos años 105 millones de dólares. Por el comportamiento transaccional que se le verificó, claramente hacían trading”, explicaron las fuentes del caso. O sea, cambiaban dinero a cripto y viceversa, obvio, por un canon.
A los ciudadanos chinos les estaba entrando dinero de distintas estafas virtuales y lo que estaban haciendo era esconder la plata, ocultarla y cambiarla.
Justamente, Barbatelli no fue el único detenido este miércoles. Sus cómplices, una mujer y dos hombres de nacionalidad china, cayeron en la localidad bonaerense de Béccar. Ellos se encargaban del trading de criptoactivos.
A estos tres detenidos, el fiscal Musso les imputó “una participación en la estafa”. Aunque no mira con malos ojos que luego todo decante a un lavado de dinero.
Con el argentino identificado y sus cómplices chinos también, este miércoles se hizo el procedimiento conjunto: “Se allanó, se detuvo a todos y de las billeteras descentralizadas de hardware (NdeR: unos dispositivos chiquitos donde se almacenan las llaves privadas de las wallets), en el mundo de lo tangible se secuestró lo que representa 650.000 dólares que, en realidad, son criptos en distintos tipos de cripto”.
Estaban en 53 billeteras diferentes. “Este es el secuestro más grande de Argentina, por lejos, de criptomonedas hecho de este modo, es decir, en el contexto de un allanamiento con una detención”, se jactaron los investigadores consultados por este medio.