Un joven de 19 años que era buscado por haberle disparado a policía y herirlo de gravedad, durante un robo ocurrido en La Matanza, fue detenido en las últimas horas por el Policía bonaerense, indicaron fuentes del caso a Infobae.
El hecho ocurrió el 22 de marzo pasado y el caso fue revelado en “X” por el Ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff. ”El oficial de la Policía de la Ciudad Luis Alberto Ortega recibió 4 disparos cuando salía de su casa, en La Matanza. Está siendo intervenido en el Hospital Paroissien, con un pronóstico delicado. Vamos a exigir que aparezcan los delincuentes para que los sienten frente a la Justicia. Acompañamos a la familia del oficial Ortega y a toda nuestra fuerza en este delicado momento”, escribió el funcionario porteño en la red social en esa oportunidad.
De acuerdo a la investigación, a cargo de la UFI N°1 de La Matanza, Danilo David Castillo interceptó al efectivo junto a un cómplice cuando salía en moto de su casa del barrio Los Pinos, en Villa Luzuriaga. El agente de la Comuna 1 se resistió al asalto de los motochorros y se produjo un tiroteo. En ese contexto, recibió un impacto de bala en un glúteo y en el abdomen. La secuencia quedó registrada por una cámara de seguridad.
Ortega fue trasladado de urgencia al Hospital Paroissien, de Isidro Casanova. En tanto, uno de los ladrones, identificado como Facundo Mariño, de 22 años, fue atrapado a pocas cuadras de la escena con un disparo en una axila y otro en la cadera.
Aunque intentó simular que había sido víctima de un atraco, no logró engañar a los uniformados que lo detuvieron en el lugar. Luego, Mariño fue asistido en el mismo centro de salud en el que fue internada la víctima.
En el lugar del hecho, quedó tirada la Honda 150cc del policía, junto a su arma reglamentaria Pietro Beretta Storm. Los ladrones también abandonaron la moto en la que habían llegado y que, luego establecieron, tenía pedido de secuestro. Todos estos elementos fueron incautados en el marco de la causa, precisaron las fuentes.
Mientras tanto, el ladrón identificado como Castillo, quien fue señalado como la persona que baleó a Ortega, logró escapar y refugiarse en algún escondite, donde permaneció oculto hasta que fue descubierto.
Tras diversas tareas de campo y el análisis de las cámaras de seguridad, los investigadores pudieron determinar que se encontraba “merodeando la zona de San Justo, más precisamente en la calle Illia y Marcón donde funciona una estación de Servicio YPF”.
De manera encubierta, lograron acercarse sin alertar al presunto delincuente y, de manera sorpresiva, lo redujeron y le pusieron las esposas, según detallaron fuentes policiales a este medio.
Así, el motochorro de 19 años fue imputado por tentativa de robo agravado por el uso de arma de fuego y encubrimiento agravado.