A casi dos años del femicidio de Margarita Bascuñán Sánchez (51), quien fue asesinada a golpes en la cabeza dentro de su casa, en la ciudad cordobesa de Salsipuedes, condenaron a prisión perpetua al acusado, Fabián Alejandro Romero (56), su pareja.
El juicio fue realizado con jurado popular en la Cámara de Cuarta Nominación, donde el Tribunal encontró culpable al asesino, por el delito de homicidio calificado por el vínculo y por mediar contexto de género.
A pesar de que la última decisión fue brindarle la condena, el femicida intentó defenderse diciendo que le atribuían algo que no había hecho porque los moretones que tenía Margarita eran producto de una caída en bicicleta el día anterior a su muerte. Además, insistió en su versión del accidente doméstico aduciendo que cuando la trasladó al Hospital de Urgencias la encontró tirada en el baño cuando llegó de trabajar.
Según detalló el medio local El Docetv, fue la noche del 18 de abril, que Margarita Sánchez ingresó al centro de salud con muerte cerebral, y a pesar de las explicaciones de Romero, los médicos advirtieron la gravedad de las heridas y la Policía de Córdoba lo detuvo de manera inmediata. Al día siguiente, la víctima murió.
“Conforme no estoy porque a mi hija nadie me la devuelve, pero sí más tranquilo”, expresó entre lágrimas Jorge, el papá de la ciudadana chilena, luego de oír la sentencia final.
Cristian, uno de los hijos de Margarita, aseguró en Telenoche que tenían “sentimientos encontrados “. De igual forma, expresó su agradecimiento con las autoridades cordobesas. “Se hizo justicia, agradecidos con la fiscal, los abogados y con el Polo de la Mujer”, señaló. Además apuntó contra el imputado y aseguró: “Siempre tuvimos claro que era el asesino”.
En tanto a los alegatos de la fiscalía, Laura Batistelli, fiscal de Cámara, pidió explícitamente que sea declarado como autor de homicidio calificado por el vínculo y por mediar contexto de género, siendo la prisión perpetua la única condena que prevé el Código Penal.
Según su análisis, el femicida “planeó todo”. “No fue un plan a corto plazo, esto es el resultado de una conducta que tenía como finalidad terminal”. “Ese día la golpeó en el mentón y en la cabeza con tres golpes que le causaron el traumatismo de cráneo encefálico que la llevaron a un coma irreversible”, sentenció.
Además, remarcó que Romero “nunca pidió auxilio”, limpió la escena del crimen y “trabajó en las sombras durante casi 24 horas”.
La funcionaria concluyó que Margarita Bascuñán Sánchez “cronicó su propia muerte a través de videos, fotos y pedidos de auxilio” y consideró que al ser una “mujer empoderada” fue “muy difícil visualizarla en esa situación”.
En este contexto, explicó que muchas veces el pedido de ayuda “depende del receptor”. “Normalmente cuando las mujeres son empoderadas y fuertes la ayuda tarda porque la visión de los que están alrededor es que esta mujer puede levantarse por sí sola”, argumentó.
“No encontró eco, al contrario, la hermana del imputado abonó la llegada de esta situación”, dijo en referencia a que el pedido de auxilio habría sido hecho a la hermana del imputado.
“Margarita resultó muerta dentro de un ámbito de violencia de género por quien era su marido”, afirmó. Inclusive aseguró que la mujer intentó escapar: “Todo lo que tenía en su auto hablaba de que estaba preparada para irse, despegar del círculo. Quizás fue esto lo que provocó la discusión que la lleva a la muerte”.
Es importante destacar que el hombre tiene antecedentes vinculados al acoso sexual de menores. Fue denunciado por sus alumnos en el colegio donde él se desempeñaba como profesor de matemática, física y dibujo técnico, por lo qie fue apartado del cargo en octubre de 2021.
El crimen de Bascuñán Sánchez empujó a los estudiantes a movilizarse y pedir ser escuchados.”Los chicos están conmocionados porque él fue su profesor, estuvo al frente del aula mucho tiempo. No pueden creer que haya matado a una persona”, advirtió una mamá.