Pese a las medidas de seguridad, ningún integrante de la organización vio venir el operativo que se avecinaba: fueron sorprendidos en plena tarea por los agentes de la Dirección Hidrovías del Paraná de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la PFA que habían vigilado por varios días el punto de drogas que funcionaba detrás de un maxikiosco de José C. Paz en busca del momento preciso para allanarlo..
Las tareas investigativas fueron efectivas y no les dejaron tiempo a los narcos para escabullirse con la droga ni las armas que escondían bajo la pantalla del negocio de golosinas.
Un video, al que accedió Infobae, muestra el difícil acceso de los federales al comercio, en un angosto pasillo en una calle de tierra, rodeado por otros locales.
Luego, con la ayuda de un pesado ariete, tiraron abajo la puerta metálica negra, reforzada con rejas, un ingreso interno enmascarado con el diseño del kiosco y especialmente preparado para evitar intrusos en el búnker.
Los agentes notaron que la edificación contaba con una pequeña ventana por donde se hacían las ventas a los ocasionales consumidores. Además, tenía aire acondicionado, sillón para la comodidad del dealer, wifi y un sistema de cámaras de videovigilancia que monitoreaba el interior como las adyacencias del comercio, lo que hizo dificultosa la llegada de los policías para realizar la irrupción sin ser detectados. Por esa razón, los investigadores debieron sincronizar el ingreso y hacerse pasar como clientes de la banda narco.
En el lugar se hallaron 3,5 kilos de clorhidrato de cocaína y 1,5 kilos de marihuana ya fraccionada para su venta unitaria. También se procedió al secuestro de dos armas de fuego, ambas pistolas, una de ellas con numeración suprimida y una importante cantidad de municiones, dinero en efectivo, balanzas, elementos para el corte de la droga y otro material para acondicionar las drogas.
Por el volumen de lo secuestrado, se calcula que aproximadamente fueron sacadas de circulación unas 7.000 dosis de droga, detallaron las fuentes. Por último, hubo tres sospechosos detenidos, quienes quedaron a disposición de la Unidad FuncionaI de Instrucción (UFI) N°16 del Departamento Judicial de San Martín.
Fiesta electrónica de Tucumán
Agentes de la Superintendencia de Drogas Peligrosas lograron infiltrarse en fiestas electrónicas clandestinas de la provincia Tucumán sin ser detectados por los organizadores y recolectaron, durante meses, pruebas por la venta de éxtasis.
Estos eventos presentaban como característica principal que ningún asistente conocía el lugar hasta minutos antes de iniciarse, momento en el cual mediante la utilización de redes sociales se informaba la ubicación y vendían las entradas que costaban unos $20.000, con la posibilidad implícita de obtener estupefacientes del tipo metanfetaminas, ácido lisérgico, ketamina y marihuana, entre otras sustancias, indicaron fuentes policiales.
De esta manera, en las primeras horas del día domingo se ejecutó un gran despliegue policial que contó con un centenar de efectivos policiales y con la utilización de un dron procedieron a la irrupción en una finca en la zona de Tafí Viejo, donde se desarrollaba un after.
De acuerdo a la información, detuvieron al organizador del evento en el lugar, mientras que otro grupo de efectivos procedió a irrumpir un domicilio en la Ciudad de Tucumán y allí apresó a su colaborador.