Escenas de pánico se vieron el domingo pasado en el barrio de Villa Hudson, en la localidad bonaerense de Florencio Varela, cuando se desató un tiroteo entre bandas narco a plena luz del día. Uno de los lugares donde más se sintió la balacera fue una canchita de fútbol 5: allí se observó a jugadores y asistentes mientras se resguardaban de los disparos.
Según se ve y se escucha en un video registrado por un testigo que estaba en la canchita, la ráfaga de tiros fue intensa. En total, al menos en lo que se cuenta en las imágenes que encabezan esta nota, se registraron nueve detonaciones. Los clientes del predio, mientras eso sucedía, se ocultaron como pudieron; aunque algunos, sin embargo, se movieron con relativa tranquilidad.
De acuerdo con el diario Infosur, el tiroteo se registró en las inmediaciones de la calle Marcos Sastre, entre Oliden y 33 Orientales y el enfrentamiento armado se oyó desde la cancha, ubicada a unas dos cuadras del lugar del ataque. Si bien no hubo heridos, varios vecinos sí sufrieron daños en sus viviendas por las balas perdidas.
Ante la violencia de la situación, se originó un rápido despliegue policial, con aproximadamente 10 patrulleros que comenzaron a perseguir a los delincuentes. Según los testigos, algunos de los presuntos narcos involucrados portaban pistolas calibre .22 y se desplazaban en dos motos, una Honda Tornado y una Bajaj Rouser.
A pesar de la fuerte presencia policial, los delincuentes lograron escapar. Vecinos indicaron que parte de los gatilleros lo hizo a bordo de un Volkswagen Golf de color azul. Sin embargo, no todo terminó allí.
Horas después, poco antes de la medianoche y también en Florencio Varela, en las calles La Rastra y El Tordillo, dos bandas narco protagonizaron otro enfrentamiento a tiros. Esta vez, una persona resultó herida y debió ser trasladada de urgencia al Hospital de San Francisco Solano.
De acuerdo a los medios locales, los vecinos denunciaron que los enfrentamientos narco son cada vez más frecuentes.
También en La Matanza
Como parte de la agenda de Semana Santa, en varios puntos del país se realizó el tradicional vía crucis. Sin embargo, una situación insólita se vivió en La Matanza, debido a que la representación fue interrumpida por un enfrentamiento armado entre la Policía Bonaerense y un grupo de delincuentes.
Ocurrió el viernes a la noche en la zona de Villa Palito, cuando una persecución policial detuvo la celebración religiosa en el frente de la parroquia del barrio. En respuesta de los disparos y la abrupta llegada de los automóviles, los participantes de la reunión tuvieron que escapar para resguardarse.
En uno de los videos filmado por los asistentes al vía crusis, se puede observar cómo todo cambia de un momento a otro, mientras de fondo se podían escuchar las sirenas policiales y los disparos. Segundos más tarde, en la escena ingresó un auto Nissan Versa color blanco, seguido de un patrullero.
Cuando los jóvenes se percataron de que se trataba de una persecución policial, comenzaron a escapar a las corridas. Incluso, la grabación captó algunos de los gritos de los presentes, ya que la balacera entre los policías y los delincuentes no se había detenido.
Según la secuencia que logró reconstruir el medio local Primer Plano Online, el operativo comenzó sobre las calles Derqui y Padre Bachi, luego de que los ocupantes del Fiat Nissan se negaran a detenerse en un puesto de control. Al escuchar la voz de alto de los oficiales, el conductor aceleró con la intención de escapar hasta que se vieron acorralados en el cruce de Padre Bachi con Chile.
Al toparse con la procesión religiosa, los tres sospechosos comenzaron la fuga a pie. Finalmente, dos de ellos consiguieron escapar, mientras que los agentes pudieron detener a un ciudadano de nacionalidad chilena, identificado como Andrés Freddy Villarroel Yañez (49), quien viajaba sentado en la parte trasera del vehículo.
Horas más tarde, se conoció que el automóvil había sido robado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,