Los jugadores del club Vélez Sarsfield acusados de violar a una joven de 24 años en un hotel de San Miguel de Tucumán, seguirán detenidos en dicha provincia: la jueza Laura Casas confirmó este lunes la prisión preventiva. Así los futbolistas permanecerán en la Dirección General de Investigaciones, antes de pasar a cumplir arresto domiciliario por un plazo de 90 días en la provincia y previo al inicio del juicio.
Se trata de Braian Cufré, Abiel Osorio y José Florentín Bobadilla, que, días atrás, solicitaron recuperar su libertad como su compañero Sebastián Sosa; aunque, en su caso, sigue preso porque aún no pudo reunir el dinero de la fianza. Una vez depositada la caución, el arquero podrá regresar a Buenos Aires, pero con la obligación de presentarse cada 15 días en Tucumán. Además, tendrá prohibido salir del país por 90 días.
De momento, los deportistas continúan imputados, pero con distintos grados de participación: Cufré y Florentín están acusados de abuso sexual agravado por la participación de dos o más personas, como coautores; mientras que Osorio enfrenta abuso sexual simple. Sosa, en cambio, le endilgaron abuso sexual agravado en calidad de partícipe secundario. Los cuatro deberán pagar cauciones de 50 millones de pesos.
Según informó el portal El Tucumano, tras el fallo de impugnación, las defensas de los jugadores se mostraron en contra de la resolución de la magistrada. “No estamos conformes, pero no quiero decir nada en este momento. Hoy no hay nada más para hacer. Se puede interponer un recurso extraordinario”, dijo la abogada defensora de Osorio, Ileana Bataglia.
Por su parte, Ernesto García Biagosch, quien representa a Cufré, subrayó que “no era necesaria la privación de la libertad en la provincia”. Al igual que la otra letrada, planteó la posibilidad de presentar un “recurso extraordinario” ante el tribunal de impugnación.
“No estamos conformes con los fundamentos. Habíamos ofrecido una caución, pero nos solicitan que presentemos junto con el domicilio y ofrecimos garantías reales para manifestar la comparecencia al proceso, pero la jueza consideró que no es suficiente”, sostuvo García Biagosch y luego detalló acerca de la situación de los jugadores. “Hasta que consigamos un domicilio y sea aprobado seguirán en la Brigada. Están angustiados, están pasando una situación injusta. Vamos a impugnar nuevamente esta sentencia”, dijo.
En tanto, el club les suspendió el contrato a todos.
Antes de la audiencia de este lunes, el miércoles pasado, también dijo las últimas palabras la periodista deportiva que denunció la agresión sexual. Según informó la agencia Noticias Argentinas, la joven de 24 años consideró “injusto” que los futbolistas fueran excarcelados y que se les concediera la prisión domiciliaria, porque supuso que gozarían de beneficios que a ella, como víctima, le son denegados.
En ese sentido, deslizó que los ahora ex Vélez podrían permanecer juntos, incluso con sus familias, y que por su potencial económico podrían alquilar una casa con piscina y campo de entrenamiento mientras esperan el juicio oral.
Por su parte, las defensas hicieron hincapié en el temor de la presunta víctima en “cruzarse” con algunos de los denunciados y por ello justificaron el pedido para que fueran trasladados a Buenos Aires, con obligación de presentarse periódicamente ante el juzgado.
El caso
Tras el partido entre Vélez y Atlético Tucumán, la víctima denunció que fue invitada al hotel donde se concentraba el equipo de Liniers. Según sus dichos, fue Sosa quien le pidió que vaya tras una serie de mensajes de Instagram.
Al llegar a la habitación 407, la chica se encontró al jugador. Poco después, se sumaron Osorio, Cufré y Florentín. “Con los cuales comenzó a compartir unas latas de cerveza, luego le ofrecieron fernet y, después de tomar unos tragos, comenzó a sentirse mal, muy mareada, por lo que se recostó en una de las camas, como adormecida”, de acuerdo al reporte inicial.
En ese momento, según su relato, habría ocurrido el ataque. La joven dejó el hotel en un auto de aplicación, que pidió ella misma. Tres días más tarde, se presentó ante la División Delitos contra las Personas de la Policía de Tucumán para realizar la denuncia. Allí, entregó la ropa que usó aquella noche.
La fiscalía ordenó las pericias de rigor a la víctima, así como el relevo de las cámaras de seguridad y el análisis de las prendas. Poco después, los jugadores fueron separados preventivamente del plantel del club de Liniers.
En su segundo testimonio, al que accedió Infobae, la denunciante aseveró: “Sosa me empezó a escribir, diciéndome que tenía la noche libre y preguntándome si quería que tomemos algo. Yo acepté. Me preguntó si tenía alguna amiga para invitar, pero le dije que no y él me dijo que estaba con otros compañeros Yo le respondí, textualmente: ‘Mientras no se desubiquen, no hay problema’. Tipo 22, Sosa me dijo que vaya al hotel Hilton ubicado en Piedras y Miguel Lillo. Puntualmente, a la habitación 407″.
En el hotel, “me ofrecieron dos latas de cerveza y, luego, me preguntaron si yo hacía tríos o si estaba con mujeres. Les respondí que no, que no me atraía y que siempre que estaba con alguien era solo entre dos. En ese momento, me ofrecieron fernet en un termo Stanley color blanco”, remarcó.