“Decile que si llega a Seguí y Oroño lo sacamos a tiro. El que avisa no traiciona”. Esa fue una de las intimidaciones que recibió el periodista Nelson Castro y su equipo el lunes pasado durante su cobertura de la violencia en Rosario. En ese contexto, el hombre de 48 años que había sido detenido horas después fue liberado este jueves por la Justicia, luego de ser imputado por el delito de amenazas coactivas agravadas.
El juez del caso le impuso como condición para su excarcelación el pasar una vez por semana a firmar por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) y que realice un tratamiento psiquiátrico, así se lo confirmaron fuentes del caso a Infobae.
Justamente, esta tarde, el periodista se refirió a la liberación del sospechoso en su programa de Radio Rivadavia: “Quiero compartirles que ha sido liberada la persona detenida, sospechada de haberme amenazado de muerte en Rosario”.
Luego, el conductor de TN y Telenoche aclaró: “La persona confesó haberme amenazado. Es una persona absolutamente imputable, que está en dominio de sus facultades mentales”.
Este lunes, mientras se esperaba el desembarco de las fuerzas federales para combatir la violencia criminal narco que había asesinado a dos taxistas, un colectivero y un playero; el periodista Sebastián Domenech recibió en su celular tres mensajes intimidatorios, acompañados por la imagen de Castro en Rosario.
“Decile que si llega a Seguí y Oroño lo sacamos a tiro. El que avisa no traiciona. Que se vaya de Rosario, no los queremos acá afuera”, lo intimidaban con el primer texto firmado por “la mafia”. En el último mensaje continuaba con la amenaza: “Van a terminar como (José Luis) Cabezas”.
Ante esto, según pudo saber este medio, el mismo lunes se hizo un allanamiento en calle Crespo al 3100 y allí detuvieron al sospechoso de las amenazas, identificado como José Luis Z.. En el lugar, se secuestraron celulares de la misma marca solicitada en el procedimiento y, luego, se produjo el cotejo de los IMEI para identificar si de algunos de esos teléfonos había salido la intimidación.
Este jueves, José Luis Z. enfrentó la audiencia imputativa en el Centro de Justicia Penal, donde los fiscales Pablo Socca y Federico Rébola le atribuyeron al detenido el delito de “amenazas coactivas agravadas por ser anónimas, en carácter de autor y en grado de consumado”.
“La Fiscalía le atribuye haber amedrentado el 11 de marzo pasado, mediante la utilización de una línea telefónica registrada a su nombre, al personal del canal de televisión Todo Noticias, quienes se encontraban realizando cobertura periodística en la Ciudad de Rosario”, reza la información que aportaron las fuentes consultadas.
En ese marco, el juez de primera instancia Hernán Postma decidió dictarle al imputado, que no tiene antecedentes penales, la libertad bajo la condición de que se presente una vez por semana la OGJ y haga un tratamiento psiquiátrico.
Castro, este mismo jueves, luego de agradecer la solidaridad de los colegas ante las intimidaciones, sostuvo: “El sospechoso es quien me amenazó y confesó haberlo hecho. Esto demuestra la peligrosidad de Rosario”.
El periodista también pidió que la Justicia “trabaje en los otros casos con la misma eficacia y rapidez que en este”, en relación a los asesinatos de los taxistas Diego Alejandro Celentano y Héctor Raúl Figueroa; el colectivero Marcos Iván Daloia y el playero Bruno Nicolás Bussanich, ocurridos entre el 5 y el 9 de marzo pasado.
Ante esto, se conformó un comité de crisis entre el Gobierno y la provincia de Santa Fe, se enviaron fuerzas federales, mientras que a nivel local se inició una convocatoria para que policías en retiro se sumen como ayuda en las calles, custodiando escuelas, hospitales y edificios públicos.
En ese contexto, y mientras se discute el rol de las Fuerzas Armadas en la ciudad atemorizada por la violencia narco, desde el Ministerio de Justicia se anunciaron medidas para combatir el narcotráfico y este jueves se anunció la creación de la Unidad Antimafia para combatir el crimen organizado.