La justicia de Mendoza le dictó la prisión preventiva al sanjuanino Lucas Pérez Vicentela (44), acusado de matar a martillazos a su pareja, María Victoria Ruiz (44), en una casilla rodante en un camping de El Carrizal, en febrero pasado.
Según informó el portal local Los Andes, el juez Darío Dal Dosso ordenó que Pérez Vicentela siga en la cárcel hasta que sea sometido a un juicio por jurados, al avalar la imputación que le impuso la fiscalía de Rivadavia por “homicidio agravado por el vínculo de pareja, en concurso ideal con homicidio agravado por ser cometido en contexto de violencia de género (femicidio)”, delito que prevé la pena de prisión perpetua.
El pedido de preventiva había sido solicitado por los fiscales Valeria Bottini (instructora de la causa) y el jefe de la Unidad Fiscal, Mariano Carabajal. El principal argumento de los funcionarios judiciales fue que en las armas homicidas, un hacha y un martillo, se encontraron rastros de ADN del imputado y de la víctima.
Según los estudios del Cuerpo Médico Forense, Ruiz murió por una serie de golpes recibidos en la cabeza que le produjeron algunas fracturas. Estas heridas habrían sido realizadas con esas herramientas que el presunto homicida había limpiado y luego ocultado, pero que los investigadores finalmente encontraron.
A todo eso, además, se suman los registros fílmicos que ubican al acusado en el camping. También hay testigos que lo señalan en el lugar e, incluso, uno que lo llevó en su auto desde Luján a Ciudad. Estos testigos participaron luego de una rueda de reconocimiento en la que señalaron sin dudar al imputado.
Acerca del móvil del crimen, la hipótesis de los investigadores tiene que ver con una denuncia que la víctima realizó al agresor, en la que sostiene que el hombre le habría robado 10.000 pesos y hay testigos que indicaron que la pareja convivía desde octubre pasado y que la relación era conflictiva. Con estos elementos, la fiscalía sostiene la imputación y apunta a que existió violencia de género.
Por otra parte, Pérez Vicentela vendió el celular de la mujer en San Luis por 40.000 pesos, lo que marca que se trató de un homicidio criminis causa: la mató para ocultar el robo.
La defensa, según informó Los Andes, solicitó que no se dictara la prisión preventiva afirmando que no había peligro de fuga, pero el juez no hizo lugar al pedido dado que Pérez ya había escapado, lo que hace presuponer que podría volver a hacerlo. Sobre todo porque un testigo dijo que el imputado le había preguntado de qué forma podía pasar a Chile de forma ilegal.
El caso
El hecho se desencadenó cerca de las 11 del viernes 2 de febrero cuando ingresó un llamado a la línea de emergencias 911. Era el encargado del camping Rivadavia, quien alertaba acerca de una casilla rodante cerrada con llave de la que salía un olor nauseabundo.
Además, informó que desde una pequeña ventana observó un bulto, que parecía el cadáver de una mujer en estado de descomposición, que podría ser de la propietaria. dijo, también, que había visto por última vez a los ocupantes del rodado el día el viernes 29 de enero, luego de que pagaron una semana de estadía.
De inmediato, policías que llegaron al lugar corroboraron los dichos del encargado y encontraron el cuerpo de la víctima en avanzado estado de descomposición, sobre un camastro.
El martes 6 de febrero, tras una intensa búsqueda y un trabajo en conjunto entre la Dirección General de Investigaciones de Mendoza y la Policía de San Luis, Pérez fue detenido en la vecina provincia, en la localidad de Potrero de los Funes.