Miguel Ángel “Mameluco” Villalba, el máximo jefe narco del Conurbano, se encuentra alojado en la cárcel federal de Ezeiza, donde cumple una condena a 27 años de prisión. Por el Sistema Integral de Gestión para Personas Privadas de la Libertad, es considerado un preso de “alto riesgo”. En ese contexto, y la luz de que comenzó a ser juzgado 13 años después en el Tribunal Oral N°6 de Morón por el crimen de Candela Sol Rodríguez, el Gobierno pidió que siga el juicio por videoconferencia “por cuestiones de seguridad pública”.
Según pudo saber Infobae, así se lo solicitaron a la jueza del TOC N°6 de Morón María Claudia Morgese Martín desde el Ministerio de Seguridad de la Nación. ¿Las razones? “Las características y alcances de la organización delictiva que integra, sus vínculos con las fuerzas de seguridad, y el muy alto riesgo de fuga que presenta dan cuenta del riesgo cierto para la seguridad pública que importa el traslado del interno”, esgrimieron.
Además, en el comunicado que lleva la firma de la ministra Patricia Bullrich y de Julián Marcelo Curi, subsecretario de Asuntos Penitenciarios; explicaron que “su intervención en el proceso” y “los derechos” como imputado “se garantizan con su participación en el debate a través de videoconferencia desde el Complejo Penitenciario Federal I en el cual se encuentra alojado”.
Justamente, en el comienzo del juicio, que fue esta semana, el narco fue trasladado desde la cárcel de Ezeiza, en medio de un gran operativo de seguridad. Villalba está acusado de ser el ideólogo del asesinato de la menor, en medio de una aparente venganza del negocio de las drogas. Había sido testigo del primer proceso del caso, ocurrido en 2017, donde aseguró que a Candela la mataron en medio de un secuestro extorsivo.
Bullrich y Curi le pidieron a la jueza que, “por estrictas razones de seguridad pública, se deje sin efecto el traslado” de Villalba a la sede del tribunal de Morón “los días 8, 12, 13, 15, 19, 20, 22, 26 y 27 de marzo, 3, 5, 9 y 10 de abril del año 2024″.
Y explicaron que “es de público conocimiento la entidad y el alcance de la organización criminal conocida como “clan VIIIalba”, vinculada desde hace más de 20 años con maniobras” narco. Así detalla que Mameluco es el “líder del clan” que integran su hijo “Peladito”, el “Salvaje”, “Dylan” y “Diente”, entre otros.
Como antecedente, destacaron las consideraciones expuestas el 20 de diciembre pasado por la jueza federal Alicia Vence, del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 2 de San Martín, que tiene la causa contra el clan por la “cocaína envenenada”.
Y citaron a la magistrada: “La connivencia con la que cuenta la empresa criminal de parte de funcionarios que integran distintas fuerzas policiales y que está orientada al impune desarrollo de su actividad delictiva que, a mi modo de ver las cosas, conlleva una situación alarmante”. Y sigue: “La permanencia y continuidad de estas empresas ilícitas, incluso cuando sus líderes están detenidos, se consuma gracias a la venia policial, el aprovechamiento de las ineficiencias y /o ausencias del estado y a la vulnerabilidad de muchas personas que conforman los eslabones más bajos o de menor rango dentro de su estructura”.
Así, desde el Ministerio de Seguridad le dicen a la magistrada que, con ese antecedente de la jueza Vence, al ser considerado Mameluco un preso de alto riesgo es propenso a “comportamientos violentos, manipulativos y de extorsión, afectando así a toda la sociedad”.
“En esas condiciones, los elementos objetivos detallados anteriormente, en particular, las características y alcances de la organización delictiva que integra Villalba, sus vínculos con las fuerzas de seguridad, y el muy alto riesqo de fuqa que presenta, dan cuenta del riesgo cierto para la seguridad pública que importa el traslado del interno desde el Complejo Penitenciario Federal I a la sede del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 6 del departamento judicial de Morón”, concluye.
El juicio
El caso involucra una compleja trama que pone de manifiestos los nexos entre policías, informantes y narcos. Además de “Mameluco”, el fiscal Mario Ferrario, a cargo de la imputación, acusa al ex policía Sergio Fabián Chazarreta; al “buchón” de las fuerzas de seguridad Héctor Horacio “Topo” Moreira, y al carpintero Néstor Ramón Altamirano, señalados como coautores de la privación ilegal de la libertad coactiva seguida de muerte de Candela.
A diferencia de “Mameluco”, los tres llegan en libertad al debate. El narcotraficante cumple una condena de 27 años por tráfico de drogas y lavado de dinero.
Moreira, el informante según la causa, habría señalado al papá de Candela, Alfredo Omar “Juancho” Rodríguez, en ese momento preso por piratería del asfalto, como el responsable de llevar datos a la Federal que permitieron atrapar a “Mameluco”. Ese dato, aparentemente erróneo, habría sido el que desencadenó el crimen de la nena de 11 años, en medio de una venganza narco orquestada por el jefe del clan Villalba.