Un trágico episodio ocurrió este miércoles en la provincia de Córdoba: un operario murió dentro de una cámara séptica cuando se encontraba realizando una inspección. Otros dos compañeros que estaban junto a él también se desvanecieron, pero lograron ser rescatados a tiempo.
El hecho sucedió pasadas las 15 horas en Barraca Córdoba, una curtiembre ubicada en la avenida Juan B. Justo al 10.500, en la ciudad Estación Juárez Celman -departamento Colón- 19 kilómetros al norte de la capital provincial. Hasta allí se habían dirigido un grupo de trabajadores con la misión de hacer una inspección y el mantenimiento de de una cisterna.
Según informaron fuentes policiales, aparentemente los tres perdieron el conocimiento por la inhalación de gases tóxicos.
Dos empleados fueron rescatados por sus propios compañeros, sin embargo el tercero no corrió con la misma suerte y falleció en el lugar. Además del motivo de la muerte, se investiga si contaban con las medidas de seguridad necesarias para dicha tarea de alto riesgo.
La víctima fatal fue identificada como Carlos Díaz, de 52 años. Mientras que los sobrevivientes son José Torales y Brian Álvarez, de 22 y 33 años, respectivamente. Ambos recibieron oxigenación mecánica en el lugar y de inmediato fueron trasladados al Hospital Elpidio Torres donde quedaron internados y con pronóstico reservado.
Al predio fabril acudió una dotación de la Dirección de Unidades de Alto Riesgo (DUAR) de la Dirección de Bomberos, efectivos policiales y grupos de rescate y emergencias médicas.
Desde la DUAR se informó que los operarios bajaron a la cámara séptica que cuenta con 12 metros cúbicos para la realización de las tareas de inspección y mantenimiento. “Entró uno de los trabajadores y se desvaneció. Entró otro y también se desvaneció. Entró un tercero y corrió idéntica suerte. Sus otros compañeros se metieron y pudieron salvar a dos de los desvanecidos, pero no al tercero que falleció”, señaló una fuente oficial a La Voz. Hasta el momento, desde la empresa no hubo comunicado ni explicación oficial sobre el trágico suceso.
En diálogo con Cadena 3, Francisco, uno de los trabajadores que salvó a sus compañeros relató el desesperante momento: “Bajaron a la cámara para limpiarla sin protección. Cuando nos avisaron que había un problema, fuimos rápido. Primero, sacamos a dos de los chicos con una soga y, después, sacamos a nuestro compañero que falleció y ya no respiraba”.
“El que murió es el mayor y tenía mucha experiencia. Fue el que bajó primero. Mi primo, Brian, es uno de los que rescatamos y ahora se encuentra mejor, pero está con un respirador”, agregó el operario.
“No sé por qué se metieron así nomás, sin protección. Yo estaba con un barbijo porque me obligan a usarlo para pintar. Los vi y estaba saliendo un hombre que dijo que llamaran a los bomberos, porque no se podía estar abajo”, precisó en declaraciones a El Doce.
“Soy creyente y dije ‘Dios, guardame, ayudame’. Salté y lo agarré a mi primo primero, me dieron una soga y lo até. Lo levanté y lo sacaron. Después saqué a los otros dos hombres”, concluyó.
El comisario Víctor Pereyra explicó que la víctima fatal bajó “para hacer una limpieza más minuciosa” y advirtió que “este tipo de fosas contiene sustancias peligrosas para el contacto con el cuerpo”.
En cuanto al estado de salud de los dos obreros rescatados, se encuentran internados en el Hospital Elpidio Torres. El primero está entubado, en estado crítico, mientras que el segundo presenta un pronóstico favorable.
La causa quedó a cargo de la fiscal Patricia García Ramírez, quien dispuso las primeras medidas para avanzar con la investigación. Ordenó recabar testimonios y los peritajes correspondientes del lugar que quedaron a cargo de la Dirección de Bomberos y de la Policía Judicial.
A fines de agosto del año pasado, en la localidad de Oncativo ocurrió un hecho similar en el que tres operarios fallecieron mientras inspeccionaban una estación de bombeo de líquidos cloacales en un predio municipal. La autopsia determinó que murieron a causa de asfixia por la intoxicación con gases tóxicos (amoníaco). Además, otro operario resultó con diversa lesiones.
Por ese hecho imputaron a Dante Urli, titular de la empresa, por los delitos de homicidio culposo agravado por el número de víctimas y lesiones culposas. La compañía no habría garantizado las condiciones mínimas de seguridad de sus trabajadores.